Sicarios dieron muerte al corozalero Carmelo José Barreto Barrios, de 52 años, quien se desempeñaba como mensajero de la planta de sacrificio de ganados Friogan, en Corozal. El crimen ocurrió entre las 10 y 30 y 11 de la mañana de ayer, justo en la entrada a la residencia de sus padres en el barrio San Miguel, ubicado en el corazón de esa municipalidad. Fuentes informaron que Carmelo José Barreto salió de la planta donde trabajaba a una entidad bancaria de Corozal, al parecer a realizar algunas consignaciones. De allí salió hacia su casa donde fue interceptado por los asesinos, quienes le dispararon dos veces antes que entrara a la residencia. Uno de los proyectiles hizo blanco en la región inguinal izquierda y el otro a la altura del pecho. Este último al parecer le perforó el pulmón. Murió en el Hospital de Corozal. Carmelo Barreto Barrios llevaba cerca de 10 años prestando sus servicios al frigorífico, primero en calidad de conductor y posteriormente fue contratado de manera directa como mensajero, desde hace aproximadamente 5 años. Los directivos de Friogan expresaron sentirse consternados por ese acto criminal.
Sucesos
Sicarios matan a un empleado de Friogan
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