El 2017 terminó violento, pues en el último mes se presentó el mayor número de homicidios que cualquier mes del año. Tal parece que la calma no fue lo común en la ciudad durante diciembre, pues el 12° mes del año cerró con 35 asesinatos en 27 barrios diferentes, lo que representa el 28,1% del total de barrios en los que mataron en el año.
Aunque en los primeros dos meses del año, las cifras de asesinatos mostraron un descenso marcado y el balance era positivo, después de mitad de año todo cambió. Dos fines de semana trágicos tuvo la ciudad: en julio, en medio de las celebraciones de la Virgen del Carmen; y el tercer fin de semana de diciembre. En estos dos espacios de tiempo, hubo más de 5 casos.
Que una persona se encontró con su rival en una fiesta y se enfrentaron, que otro intentó mediar en una pelea entre familiares y terminó muerto o que fueron agredidos brutalmente por cobrar un dinero, siguen siendo los escenarios más vistos en la ciudad donde nuevamente subieron los índices de homicidios de riñas. En comparación con el 2016, donde hubo 239 asesinatos, aumentaron en 11 casos más y sigue siendo la intolerancia en los barrios la principal causa de estas muertes y también el principal objetivo a superar para las autoridades locales.
Más muertes que días
El mes más bonito del año, lastimosamente, también fue el más sanguinario. Las alarmantes cifras muestran que hubo 35 asesinatos, en los 31 días que lo conforman y esto indica que es la cifra de asesinatos en diciembre más alta en los últimos ocho años. Diciembre de 2017 solo fue superado por el diciembre fatídico de 2012 en el que se presentaron 38 homicidios. Pese a que en 2016 este mes fue uno de los más tranquilos con solo 13 casos, en el 2017 se convirtió en el más violento superando a julio que cerró con 24 de estos crímenes
El primer fin de semana, con cuatro muertes violentas, no se comparó con el tercero en el que nueve personas fueron asesinadas despiadadamente en Cartagena y sus corregimientos. Uno de los casos más impactantes ocurrió en Bayunca, donde seis personas, al parecer, fueron a robar a un soldador pero la comunidad se dio cuenta del delito así que se fueron contra los delincuentes. Una madrugada cruenta tuvieron los habitantes de esta comunidad, tras empezar el día con dos personas linchadas que fueron señaladas de cometer el hurto al soldador que terminó muerto en el robo que desencadenó la violenta reacción.
Los atracos dejaron siete muertes en el mes, de los cuales cuatro fueron señalados de ladrones y fueron linchados por la comunidad.
Otro de los casos más estremecedores del mes ocurrió en una celda de la cárcel de Ternera, cuando Cindy Mattos Díaz, de 26 años, fue a una visita familiar pero su pareja la sorprendió con una puñalada certera. En medio de su encuentro, donde aún se desconocen los motivos, Luis Miguel Beltrán se enfureció y supuestamente agarró una platina afilada que le enterró en el cuello. Los gritos de Cindy se escucharon en gran parte de la cárcel, los guardias corrieron hasta la celda e hicieron lo posible por trasladarla rápido a un centro asistencial mientras ella se sostenía la herida con la mano. Minutos después falleció y ahora Luis, desde la cárcel, enfrentará este nuevo proceso por homicidio.
De las 35 muertes del mes, 13 obedecieron a riñas interpersonales y de esos, 9 eran víctimas jóvenes entre 18 y 30 años. Los sicariatos también ocuparon una gran parte de los homicidios con 11 casos. Un dato relevante es que los 35 homicidios ocurrieron en 27 sectores diferentes y en 17 de los 31 días del mes.
El último día del año se empañó por dos casos de atraco, que en el mes fueron 9, uno de ellos fue el de la joven Angélica Pérez.
La intolerancia crece
Los sicariatos siguen en un segundo plano, mientras que las riñas aumentan y las autoridades están alarmadas. De hecho, el general Luis Humberto Poveda, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, indicó que el consumo de alcohol como transmisor de la intolerancia, ligado a la falta de diálogo para resolver los problemas de forma pacífica son el punto crítico de la ciudad. De los 250 homicidios, 104 obedecieron a riñas y de estas 83 fueron por problemas interpersonales. Es relevante que en los primeros cuatro meses del año ya habían matado a 27 personas por riñas interpersonales. Algunas de las víctimas de estos casos, fueron personas que no tenían que ver en la disputa y que murieron cuando intentaban mediar en una confrontación en la que estaba involucrado un familiar o un amigo.
Fue el caso de Hermes Parra Chamorro, a quien asesinaron de una puñalada en el pecho y dos machetazos por defender a uno de sus hijos en junio. El hecho ocurrió en El Espinal. Según explicaron sus familiares, el hijo de Hermes discutió con un muchacho en la noche y luego se fue a tomar en El Centro. Más tarde, tras dejar las asperezas a un lado, su madre estaba preocupada y le dijo a Hermes que lo fuera a buscar para evitar otro altercado. Sin embargo, cuando llegaron a la casa, el sujeto con el que el joven había discutido regresó en compañía de un familiar y, aunque intentaron arreglar las cosas, le dieron una puñalada en el pecho a Parra Chamarro además de rematarlo con dos machetazos.
Jaider Padilla Arias, de 14 años, estaba jugando fútbol cuando llegó otro joven de 16 años y se unió al partido. De repente este comenzó una discusión con Jaider porque se quería llevar su balón, pues según el relato de los familiares, decía que era de él hasta que se fueron a los golpes. Al pensar que todo estaba resuelto, Jaider se sentó con sus amigos a hablar en un bordillo y el muchacho lo amenazó con que regresaría. Ese regreso fue fatal porque le propinó una cuchillada en el cuello a Jaider que lo mató minutos después. Jaider hace parte de las 9 víctimas menores de edad que murieron en medio de riñas este año, seis de ellos en problemas entre pandillas.
Siguen muriendo los jóvenes
Más del 56% de las víctimas del año fueron jóvenes entre 18 y 30 años, lo que representa 142 casos incluyendo un feminicidio. Este número también aumentó con respecto al 2016, en el que fueron 137 víctimas menores de 30 años.
La cifra en el resto de las edades no llega ni siquiera a 100, pues 57 personas entre 30 y 40 años fueron asesinadas; y 33 víctimas de más de 40 años. El mes donde más menores de edad murieron fue en septiembre, con cuatro casos y uno fue señalado de intentar robar a otra persona.
En cifras
Como ya mencionamos, el mes más sangriento fue diciembre que superó los 30 casos, afectando de manera negativa las cifras de la ciudad pues el año pasado ningún mes alcanzó este número. Sin embargo, el resto de meses se mantuvo en poco menos de 19 crímenes, solo marzo, mayo y julio superaron los 20 casos con 23 y 24 muertes violentas. El mes más tranquilo fue enero con 15 homicidios, lo que resaltó nuevamente la tendencia de que el segundo semestre del año aumente la cifra; tan solo en los primeros seis meses hubo 111 muertos comparando con el segundo semestre donde se presentaron 138.
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