Fueron siete días en los que no hubo dolor ni luto en la ciudad por culpa del ataque de sicarios, atracadores o por riñas. Siete días en los que no hubo asesinatos. Sin embargo, la buena racha acabó el domingo en la noche, cuando mataron a balazos a dos jóvenes, en Olaya Herrera y la urbanización Flor del Campo.
Quien primero encontró la muerte fue Julián Herrera Gómez. El joven, de 21 años, vivía en la manzana 7 de la urbanización Flor del Campo, junto con su mujer y su hija, una bebé de 4 meses. Sus parientes explicaron que tenía nueve meses trabajando como vigilante en una construcción contigua al sector. También dijeron que hace varias semanas discutió con un joven al que apodan ‘el Chino Ronco’, que vive en Colombiatón, urbanización que está junto a Flor del Campo. Los motivos de la discusión se desconocen.
Cuentan que el domingo en la noche, Julián se fue con un hermano y varios amigos a una discoteca que está en la vía principal de Colombiatón. Todo era diversión, hasta que a las 9:30 p.m., llegó el horror.
“Estábamos en la discoteca cuando llegaron ‘el Chino Ronco’ y ‘el Arón’. Cada uno tenía un revólver 38. Fueron a donde estaba mi hermano Julián y primero ‘el Arón’ le dio un balazo en el pecho. Después, ‘el Chino Ronco’ también le cayó y le dio un balazo en el tórax.
También le dieron un balazo en un brazo a ‘el Chupa Deo’ y a otro muchacho lo hirieron en una pierna”, relató un hermano de Julián, que en ese momento los acompañaba.
El retumbar de los balazos causó pánico entre los presentes. Los agresores aprovecharon la confusión y en medio de la multitud se escabulleron. A Julián lo llevaron a la Clínica Madre Bernarda, pero allá llegó muerto.
El hermano de la víctima reconoció que el hecho hace parte de líos entre pandillas. “Julián discutió con ‘el Chino Ronco’ y por eso este lo estaba cazando, solo por esa discusión lo mató. ‘El Chino Ronco’ solo quería una oportunidad y esperó que Julián se metiera en Colombiatón para darle”, concluyó el hermano del joven asesinado. Los otros dos jóvenes que salieron heridos están fuera de peligro y se recuperan en sus casas.
En Olaya Herrera
Por otro lado, está el asesinato de Jefren José Puello Zárate, de 25 años. Vivía en la calle Las Maravillas del sector Central, en Olaya Herrera y comentan que el domingo en la noche salió de su hogar rumbo a un sector cercano, que llaman Las Marmotas, acompañado por su esposa.
Se dice que estaba en las afueras de un baile de picó, cuando se armó una pelea entre varios de los que estaban en el lugar y jóvenes del sector El Campamento.
Puello Zárate recibió un balazo en el tórax y pese a que lo llevaron de inmediato a un centro médico cercano, llegó sin signos vitales. Una versión deja ver que todo pasó cuando Jefren intentaba mediar en la riña, en la que se enfrentaron dos jóvenes, a los que llaman ‘el Puerco’ y ‘Kevin’.
Dicen que mientras Jefren agarraba a ‘el Puerco’ terminó recibiendo un balazo letal en el tórax. La Policía analiza esta versión y al mismo tiempo indicó que tiene identificados a dos de los presuntos agresores.
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