Aunque no se conocían, Juana Anaya Hernández y José Álvarez Mercado encontraron la muerte el mismo día, en situaciones parecidas: ambos fueron víctimas de accidentes de tránsito. Los hechos ocurrieron el jueves pasado.
El primero en sufrir la tragedia fue José, un anciano de 90 años que vivía solo, en el sector Villa Rubia, en San Fernando. Nació en La Guajira y luego se mudó a Bogotá, donde conoció a la madre de sus tres hijos, pero luego se separó de ella y se vino a Cartagena, donde tenía casi 30 años.
Uno de sus hijos desapareció, otro murió tras ser arrollado por un carro y la hija que le queda reside en Bogotá, explicó un allegado.
El jueves en la mañana, el anciano salió a una cita médica, pero cuando cruzaba la vía principal de san Fernando una moto lo arrolló.
Lo llevaron a la Clínica Madre Bernarda, donde murió horas después ante los múltiples traumas. “El mototaxista que lo arrolló dice que José dudó cuando iba a mitad de camino y terminó arrollándolo”, explicó una vecina del anciano.
Por otro lado está el drama de Juana Anaya, de 64 años, la mujer que murió el jueves en la tarde, cuando iba de parrillera en una mototaxi por la vía La Cordialidad, frente a la Terminal de Transportes, y fue arrollada por una volqueta. El conductor de la moto quedó herido de gravedad y está internado en la clínica Barú.
“Ella era de San Juan de Urabá (Antioquia), pero de allá se vino hace varios años porque le mataron al marido y a un hijo. Trabajaba cocinando en un restaurante en el Mercado de Bazurto y ayer -jueves- regresaba de una cita médica en El Pozón cuando sufrió el accidente.
Dicen que el conductor de la moto en la que iba intentó hacer una U, y fue arrollado por la volqueta, que peleaba la vía con un bus”, relató un familiar de Juana.
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