En las calles de Arjona se respira fiesta. Hay licor, bulla y música por todas partes, menos en la calle Juncal. Allí solo hay luto.
En la Juncal vivía Johnatan Torres Castro, el muchacho que mataron ayer a las 3:30 de la madrugada en plena Plaza Principal del pueblo, a un lado de la iglesia Nuestra Señora de La Candelaria.
El asesino es alias ‘Picha de Perro’, un reconocido bandido y vicioso del pueblo que está huyendo.
Cristian Torres, hermano de la víctima, cuenta que Johnatan pasó el sábado gozando. Fue la tradicional corraleja y en la noche se quedó en la Plaza departiendo con algunos amigos. En la madrugada del domingo sobrevino la tragedia.
“Johnatan estaba con los amigos pero se paró a orinar. En ese momento ‘el Picha de Perro’ le disparó a quemarropa con un ‘changón’ sin que él se diera cuenta. No hubo pelea ni nada. Simplemente le disparó y ya”, señala Cristian.
Una sola bala al cuello acabó en segundos con la vida de Johnatan, de 25 años, mientras el asesino se escabulló entre la multitud y se perdió. A Johnatan lo llevaron rápido al hospital local pero no hubo milagro.
De Johnatan Torres solo quedan en Arjona un hijo, de 4 años, y el recuerdo de un hombre trabajador y “echao pa’ adelante” que se le medía a cualquier trabajo honesto y, según sus familiares, no gustaba de problemas.
¿Y los motivos?
Cuenta Cristian que Johnatan no tenía problemas con ‘el Picha de Perro’. La única explicación que encuentran los Torres Castro al vil homicidio es un viejo problema entre un amigo del muerto y el delincuente.
¿Pero con qué tiene que ver el problema? Lo único que responden los familiares de Johnatan es “peleas callejeras”. La Policía investiga y Arjona sigue de fiesta hasta hoy.
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