A Rafael Gustavo Barrios Mendoza los suyos lo recuerdan como un hombre alegre y buena gente. El infante de Marina profesional, oriundo de El Guamo (Bolívar), era separado y vivía con una hermana en el barrio Alto Bosque de Cartagena.
Prestaba sus servicios en Tumaco (Nariño), y por eso siempre que venía a Cartagena le pedía a sus familiares que fueran a su casa para estar con ellos. “El sabía que eso por allá en donde estaba es una zona de alta peligrosidad, donde corría mucho riesgo, por eso siempre que venía quería estar con toda la familia”, relató Aracelis Barrios, hermana del militar. Por desgracia, sus malos presentimientos terminaron convirtiéndose en una triste realidad.
El martes en la madrugada, el militar de 37 años fue asesinado junto a un colega en Tumaco, por oponerse a un atraco.
“Estaba de permiso”
Aracelis Barrios relató que el lunes en la noche Rafael Gustavo, quien deja tres hijos, estaba de permiso. Por eso se fue con su compañero Óscar Flórez a departir en un establecimiento público, en Tumaco.
Allí estuvieron hasta las 2 de la madrugada del martes, cuando salieron un momento del lugar a charlar. Pero la alegría de los dos amigos terminó tan pronto como llegaron dos delincuentes en una moto.
El parrillero bajó del vehículo de dos ruedas y fue directo a donde estaban los amigos. Les pidió sus pertenencias, pero todo indica que estos opusieron resistencia y se abalanzaron contra el atracador.
Se dice que hubo un forcejeo, pero el criminal terminó ganando y logró accionar su arma contra los dos militares, que estaban de civil. Estos sufrieron múltiples heridas. El atracador logró quitarles sus celulares y billeteras, y huyó con su cómplice.
Varias personas fueron a auxiliar a los heridos. Por Óscar no pudieron hacer algo, pues murió de manera instantánea. Barrios Mendoza aún tenía pulso y fue llevado a un centro médico cercano. Pero todo fue en vano, los galenos de turno indicaron que había llegado sin signos vitales.
“Estamos muy dolidos, Rafael era un excelente ser humano. La última vez que estuvo en Cartagena fue el año pasado. Llegó en julio y se fue en agosto. Habíamos hablado y tenía pensado venir nuevamente en abril”, relató la hermana del difunto.
Se esperaba que ayer en la tarde llegara a Cartagena el cuerpo del militar bolivarense, para ser sepultado. Las autoridades están tras la pista de los atracadores que perpetraron el doble crimen de los militares.
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