“Fueron por lana, y salieron trasquilados”. Esa parece ser la historia de dos hombres a los que mataron entre la noche del miércoles y la tarde de ayer, en Olaya Herrera y La Esperanza.
Las investigaciones de la Policía indican que uno de ellos fue baleado por un comerciante al que habría atracado, mientras que el otro fue abatido por un policía.
Entre los dos hombres a los que mataron está Michael Rentería Olivo, de 23 años. Vivía en el sector Las Brisas, junto a Zaragocilla.
Parientes dicen que trabajaba con su padre ocasionalmente en construcciones y que deja un hijo de apenas unos meses. “Ayer -miércoles- salió en la mañana a llevar a su hijo una cita médica, junto a su madre. Como que hizo todo lo que tenía que hacer y en la tarde como que se fue para donde unos familiares que él tiene en Olaya.
Él no tenía ningún tipo de problema ni tampoco andaba en malos pasos”, relató una familiar de Rentería Oliva. Pese a ello, la Policía indicó que tenía antecedentes por porte ilegal de armas.
La mujer dice que cerca de las 7 de la noche, un amigo de Michael le fue a avisar que se había caído de una moto y que lo habían llevado a la Clínica Madre Bernarda.
“Me fui de inmediato para allá y cuando llegué me encontré con que estaba muerto y su cuerpo ya lo tenían en la sala de velación de la clínica”, explicó la familiar.
Aunque los allegados del difunto dicen desconocer cómo ocurrieron los hechos, la Policía Metropolitana de Cartagena señaló que Michael habría atracado a mano armada a un comerciante del interior del país junto a la Avenida Pedro Romero, en el sector La Magdalena de Olaya Herrera.
La Policía indicó que no se tiene claro si el comerciante al que habría atracado lo desarmó y le dio un balazo en la espalda, o si le disparó a Michael con un arma de su propiedad. Dicen que al ver lo ocurrido, el conductor de la moto en la que iba Rentería huyó y lo dejó abandonado. Pese a que lo llevaron a la Clínica Madre Bernarda, Michael pereció tras la gravedad de la herida. Las investigaciones respecto al caso siguen.
Salieron perdiendo
Por otro lado, está el caso de La Esperanza. La Policía explicó que cerca de la 1 de la tarde, cuatro sujetos llegaron a un almacén donde venden cerámica, que está a la orilla de la Avenida Pedro Romero, en Alcibia.
Llegaron en dos motos y con armas intimidaron a los trabajadores, llevándose dos bolsos con dinero en efectivo y varios celulares. Con el botín en las manos, los sujetos huyeron, pero no contaban con la rápida reacción de miembros del CAI de la Policía de La Candelaria, que estaban cerca.
Testigos dicen que ello abrió pasó a una persecución que se extendió por varias cuadras, sobre la Avenida Pedro Romero. “Eso fue horrible, hubo muchos disparos y de vaina que una bala perdida no alcanzó a las personas que caminaban por allí”, dijo un vecino del sector.
La persecución terminó en el sector La Amapola de La Esperanza, a pocos pasos del CAP de La Candelaria. Allí, uno de los uniformados que participaba en la persecución le dio varios balazos a Carlos Antonio Valdez Llerena, uno de los presuntos atracadores, quien murió en el acto. Le decían ‘el Calvo’.
Los uniformados también capturaron a dos de sus presuntos compinches. La Policía confirmó que fueron recuperados $874 mil en efectivo, celulares, dos bolsos y un canguro, y decomisaron un revólver calibre 38. También fue inmovilizada una moto, de placas DGF-59D, en la que se cree iba ‘el Calvo’.
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