Hay inconformidad entre los habitantes de Marialabaja. El jueves pasado, la Policía en Bolívar capturó a Alexander Vargas Simancas, señalado de atracar a mano armada a uno de los cuatro sacerdotes de la iglesia de esa población. Luego de ser llevado ante un juez, recibió el beneficio de casa por cárcel, pese a que la víctima lo reconoció y a que fue sorprendido con un arma de fuego, calibre 38 corto, como confirmó la Policía.
Todo pasó el jueves de la semana pasada, cuando el párroco Freddy Navarro (vicario), salió de la casa cural, que está a pocas cuadras de la iglesia de Marialabaja. El sacerdote explicó que eran las 5:45 p. m. y que iba hacia la iglesia cuando un sujeto armado lo interceptó y lo obligó a entrar a la casa cural. El sacerdote indicó que el sujeto le dijo que hacía parte de una banda y que venía por un impuesto anual de $1 millón. “Yo le dije que no tenía toda esa plata, entonces me intimidó con el arma. Terminé entregándole $270 mil, que eran parte de los diezmos y las ofrendas que recibe la iglesia”, relató el cura. Tras la fechoría, el sujeto se marchó y le dijo al sacerdote que se atuviera a las consecuencias si denunciaba el atraco.
El sujeto huyó y el cura informó del atraco a la Policía, que de inmediato realizó operativos en la zona. Solo unos instantes después, el presunto atracador fue aprehendido en un establecimiento público de Marialabaja, mientras consumía licor. El sujeto fue capturado y el sacerdote lo reconoció. Al día siguiente, Vargas Simancas, de 27 años y apodado ‘el Tigre’, fue llevado ante un juez de Garantías, en Turbaco. El togado lo aseguró y le concedió el beneficio de casa por cárcel. “Es inaudito, atracó a un cura y fuera de eso tenía un arma. Se supone que la casa por cárcel es para personas que no representan un peligro para la sociedad”, indicó un habitante de Marialabaja.
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