La angustia que los esposos Tomás Lamadrid Cuero y Marina Izaziga Miraña vivían desde el sábado en la tarde acabó ayer. Pero fue entonces cuando comenzó el dolor, tras confirmar la muerte de sus dos hijos varones, Cristian David y Pedro Luis Lamadrid Izaziga, los menores de tres hermanos.
Ambos desaparecieron el sábado, a las 2 de la tarde, en las playas que están detrás de Comfenalco, en Crespo. Desde entonces los buscaban. Ayer, a las 5 de la madrugada, la penosa labor, en la que participaban buzos profesionales de la Armada Nacional y pescadores, empezó a dar frutos.
“A las cinco de la madrugada un sobrino que es pescador lanzó una atarraya en el mismo lugar donde desaparecieron y de inmediato sacó el cuerpo de Cristian. Tenía la cara morada y no estaba hinchado. Parece que antes de perderse en el mar sufrió un derrame cerebral, pero vamos a esperar a ver qué dicen las autoridades”, explicó ayer el papá de los hermanos.
El pescador lanzó la atarraya otras dos veces tratando de hallar el cuerpo de Pedro Luis, pero no tuvo suerte. Los buzos de la Armada, que buscaron el cuerpo desde las 7 hasta las 11 de la mañana, cuando tomaron un descanso, tampoco la tuvieron.
Varias horas después, a las 4:20 de la tarde, fue un salvavidas quien vio flotar el cuerpo de Pedro Luis cerca de donde hallaron el de su hermano en horas de la mañana.
“Llamaron a los Bomberos, pero fue un conocido de la familia quien nadó y arrastró el cuerpo de Pedro hasta la orilla, donde hicieron el levantamiento”, indicó Tomás Lamadrid, padre de las víctimas.
Salvando a su hermano
Cristian y Pedro Luis vivían en la calle 60 de Canapote. El primero había terminado el bachillerato y no trabajaba. Pedro Luis, quien deja un hijo de 4 años, trabajaba lavando buses de una empresa en la Plaza del Tejadillo, en el Centro. El día que encontraron la tragedia salieron de su casa a la 1:40 p. m. “Un amigo llegó a la casa a buscarlos para ir a pescar. Yo les di unos anzuelos y primero salió Pedro Luis, porque Cristian salió a hacerme un mandado. Cuando Cristian llegó se fue para alcanzar a Pedro en Crespo”, explicó Tomás.
Mientras estaban en uno de los espolones detrás de Comfenalco les llegó la mala hora. “Estaban pescando y de pronto el amigo que estaba con ellos se lanzó al mar. Llamó a Cristian y ahí fue que este se lanzó. Empezaron a nadar y de pronto los dos cogieron hacia la orilla. Ahí fue que Cristian empezó a ahogarse y Pedro se lanzó a salvarlo. Ahí se ahogaron los dos”, relató entre lágrimas la pareja de Pedro Luis, quien presenció los hechos.
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