Eleana Mercado sufre un dolor por partida doble. Además, debe lidiar con que el pequeño que crece en sus entrañas, de apenas dos meses de gestación, enfrentará el mundo sin su padre.
A Eleana, la muerte le arrebató de un solo golpe a su marido Miguel Antonio Fortich Sabalza, y a su prima Kellys Lara Mercado. El joven y la menor, de 21 y 12 años, desaparecieron el sábado en la tarde mientras se bañaban en las playas de Punta Canoa. Ayer en la mañana, terminó el viacrucis para los suyos y comenzaron las horas de dolor. Los cadáveres de estas dos personas fueron hallados en Manzanillo del Mar y Marbella.
Kellys y Miguel residían en el sector Pueblito Paisa del barrio Los Laureles, en Turbaco. La menor cursaba quinto de primaria en la institución educativa Alfonso López.
Su madre dijo que quería estudiar cosmetología y estética cuando terminara el bachillerato. Pero sus sueños no podrán cumplirse.
El sábado en la mañana, la adolescente le pidió a su mamá que la dejara salir con su prima Eleana y el marido de esta. Le dijo que se irían hasta el corregimiento de Punta Canoa (Cartagena), y que allá se quedarían hasta el lunes, en casa de la madre de Eleana. “Ese paseo lo inventaron de un momento a otro, yo no sabía si dejarla ir, pero ella me dijo: ‘mami déjame divertirme un rato’, así que le di el permiso”, indicó Ismery Mercado, madre de la menor.
A las 10:30 a.m. del sábado, Kellys, Miguel y Eleana partieron de su natal Turbaco. Llegaron a Punta Canoa y a las 2 de la tarde fueron a tomar un baño de mar. Una hora después, les llegó la mala hora. Una versión deja ver que Kellys se bañaba y que empezó a ahogarse. Miguel fue en su ayuda, pero en ese momento ambos fueron arrastrados por una ola y desaparecieron. “Eleana corrió a buscar ayuda, pero ya fue muy tarde”, dijo entre lágrimas la madre de Kellys.
Desde entonces, miembros de la Armada Nacional, Salvavidas y familiares de los desaparecidos empezaron a buscar los cuerpos. La penosa labor terminó ayer. A las 8 a.m., pescadores que iban en una canoa hallaron los dos cuerpos en Manzanillo del Mar, frente al hotel Karibana, hasta donde los arrastró la fuerte corriente.
“Agarraron el cuerpo de Miguel, pero cuando iban por el de Kellys la corriente se lo llevó y desapareció”, contó Ismery Mercado, quien en ese momento ya recorría las playas del sector junto a varios familiares, en busca del cadáver de su hija.
Miembros de la Sijín realizaron la inspección técnica del cadáver de Miguel, mientras seguía la búsqueda del cuerpo de la menor. Casi tres horas después, lo encontraron. Apareció flotando en las playas de Marbella, hasta donde lo arrastró la fuerte corriente.
Comentarios ()