Hace apenas un mes, Jeferson Villanueva Zúñiga logró sobrevivir a un ataque, en el que le dieron un balazo en una pierna. Sin embargo, ayer no pudo volver a hacerle el quite a la muerte. El hombre, quien cumplía una medida de prisión domiciliaria, fue asesinado en una riña cerca de su casa, en el barrio Pablo Sexto II, en las faldas de La Popa.
Villanueva tenía 28 años y deja una hija. Vivía con su mujer en el mencionado barrio y esta cuenta que el sábado se fue a tomar con unos amigos y que estuvo con ellos hasta la mañana de ayer. A las 8:30 a. m., estaba sentado en la terraza de la casa de uno de sus amigos, cuando se trenzó en una discusión con un vecino del sector, de 35 años.
“El hombre llegó y se la montó a Jeferson. Él decidió irse, dio la espalda y ahí fue cuando el hombre le dio varias cuchilladas en la espalda, el abdomen y los brazos”, relató la esposa del difunto. A Jeferson lo llevaron a la Clínica San José de Torices, donde llegó muerto. El presunto asesino se entregó a las autoridades. Otra versión deja ver que sería Jeferson quien arremetió contra su asesino y que empujó a la madre de este y partió una botella. El hombre se defendió con un cuchillo y lo agredió. Nada está claro aún.
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