Voces de repudio por el asesinato del exárbitro de fútbol, Eduard González Prieto se han escuchado con fuerza en la comunidad sincelejana, sobre todo en la familia del deporte de esta capital. (Lea aquí: Capturan a presunto asesino de árbitro de fútbol en Sincelejo)
Los entrenadores y árbitros de esta sección del país, así como sus familiares, han exigido a las autoridades acciones para que el crimen sucedido el pasado sábado no quede impune.
Esperan que así como ha sucedido con los homicidios de otros ciudadanos de bien, las autoridades ofrezcan recompensas a quienes den información sobre el paradero de los asesinos. (Lea aquí: Ex árbitro de fútbol resultó muerto tras recibir puñaladas en un atraco)
Eduard González Prieto perdió la vida tras sufrir varias puñaladas en la espalda al parecer en medio de un atraco ocurrido en el barrio Paraíso San Carlos.
La víctima tenía 30 años de edad, natural de Barranquilla y residente en el barrio Los Tejares, según informaron sus allegados.
Familiares del acérrimo amante del deporte del balompié e hincha del Junior de Barranquilla, dijeron que él regresaba a su casa cuando lo interceptaron desconocidos para atracarlo y al parecer él se opuso al robó.
En consecuencia, González Prieto, conocido cariñosamente como el Cachaco o el Picachú, recibió tres puñaladas en la espalda, una de ellas le afectó uno de sus pulmones, sufriendo las graves lesiones que minutos más tarde le quitarían la vida en una clínica privada de esta localidad.
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