En estado crítico permanecía hasta ayer en la mañana una niña, de un año y 2 meses, que ingirió gas. Arnulfo Molina Polo, abuelo materno de la menor, indicó que el accidente ocurrió el miércoles, a las 10:45 a. m., cuando la niña estaba en su casa, en el barrio Alto Bosque, junto a su madre y otros familiares. “Estaban quitando las luces navideñas y utilizaban el gas para despegar las luces que se pusieron en las paredes con silicona”, explicó Arnulfo.
En un parpadeo, la niña cogió la botella de gas y tomó un poco. Al notar lo ocurrido, sus parientes la habrían inducido a que vomitara y la llevaron al Hospital Infantil Napoleón Franco Pareja (Casa del Niño). “Hizo un paro cardio respiratorio, se le aplicaron medicamentos para ayudar al corazón a bombear, hizo un evento convulsivo posiblemente por la falta de oxígeno en su cerebro y la radiografía de tórax mostraba pulmones totalmente lesionados por el gas, porque desafortunadamente la niña broncoaspiró y el contenido gástrico se fue al pulmón, eso asociado a la toxicidad del gas, produce una neumonitis química, y aparte viene asociado un proceso químico por los jugos gástricos. Está bajo pronóstico reservado, su condición es crítica. En casos como estos no hay que inducir el vómito, porque hay un gran número de sustancias tóxicas que si se induce el vómito, puede tener una bronco aspiración, y entonces no va a estar comprometido solamente la parte gastrointestinal, sino algo sumamente importante que es la parte pulmonar”, explicó el galeno Ángel Guzmán, coordinador Médico de la UCI Doña Pilar.
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