En medio de la soledad y oscuridad de la madrugada, dos hombres se aprovechaban del fácil acceso a los contadores de agua de varias viviendas en el barrio El Educador, para hurtar las tapas y comercializarlas como hierro fundido.
Los uniformados, descubrieron a uno de los presuntos ladrones trepando la reja de una casa y les solicitaron una requisa. Según las autoridades, los sujetos cargaban un saco, en donde transportaban 13 tapas, con el objetivo era venderlas a una chatarrería.
El hecho ocurrió a las 5 de la mañana del jueves, mientras las patrullas del cuadrante de El Educador hacían patrullajes de rutina.
Los capturados, de 40 y 24 años, quedaron a disposición de la Fiscalía, para definir su situación judicial.
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