La tranquilidad que reinó durante varios días en la ciudad fue interrumpida. Las balas volvieron a sonar y en menos de 9 horas arrasaron con la vida de dos personas.
Las víctimas: el tendero Fabián de Jesús Gil Gómez y el joven Rafael Enrique Muñoz Moreno, a quien apodaban ‘el Canuto’. Los homicidios ocurrieron entre la madrugada y la mañana de ayer, en los barrios Olaya Herrera y Nuevo Paraíso.
Se metieron a su negocio
A Fabián Gil, de 50 años y oriundo de El Peñol (Antioquia), la tragedia le llegó en su casa. Era dueño de la tienda y terraza Verano Feliz, que está a orilla de la Avenida Pedro Romero, en el sector Rafael Núñez de Olaya. Ese negocio lo montó hace tres años.
Según versiones de familiares, eran las 2 a. m. de ayer cuando varios ladrones entraron a su negocio. Amordazaron a un ayudante y cuando Fabián salió a ver qué pasa, en medio de la oscuridad, uno de los ladrones le dio un balazo en la cabeza y luego huyó con sus compinches, llevándose solo algunos artículos de la tienda.
Tras ser herido, al tendero lo llevaron al Hospital Universitario del Caribe, donde murió a las 7:30 a. m. de ayer, menos de seis horas después de ser baleado. Según vecinos, el tendero habría dicho el miércoles en la tarde que había recibido una plata y que cuando el ladrón entró a su casa le pedía tal dinero. Por decir que no lo tenía, el ladrón le habría disparado.
Otra versión, manejada por las autoridades, deja ver que Fabián habría empeñado un arma de fuego. Supuestamente, cuando forcejeaba con el dueño, recibió el balazo mortal. Las autoridades investigan las versiones sobre el crimen para determinar el móvil. “Fabián era el segundo de diez hermanos y no tenía problemas. Tenía 25 años en Cartagena y aquí lo vamos a enterrar”, dijo un hermano de la víctima.
Por otro lado, está la muerte de Rafael Muñoz, quien hoy cumplía 19 años, pero la vida no le alcanzó para celebrarlos. Dicen que el joven vivía en la calle 9 de Nuevo Paraíso y que ayer salió de su casa a las 10 de la mañana. Solo 20 minutos después, mientras caminaba por la calle 14 del mismo barrio, cerca de su casa, un sicario que iba de parrillero en una moto le dio varios balazos, matándolo en el acto. En el lugar se vivieron escenas dolorosas cuando llegaron sus parientes. Se conoció que el joven, a quien apodaban ‘el Canuto’, tenía varias anotaciones judiciales. Las autoridades investigan qué motivo el asesinato.
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