“SCB-67D”. Esas fueron las letras y números que quedaron grabados en la mente de la mujer del mototaxista Frank Porto Iturriago, y que la ayudaron a descifrar la tragedia en la que hoy está sumida.
Ayer en la mañana, cuando leía en un periódico la noticia del hallazgo de dos cadáveres en un caño de La Boquilla, los cuales tenían signos de tortura, descubrió que en la nota decía que cerca de donde estaban los cuerpos encontraron una moto abandonada, de placa SCB-67D. Precisamente, esa era la matrícula de la moto de su marido, quien salió el domingo de su casa en Nuevo Bosque y no regresó.
De inmediato, la mujer sintió cercana la mala hora y fue a confirmar sus miedos a la morgue de Medicina Legal. Allá, hizo saber que tenía indicios de que uno de los dos hombres hallados muertos en La Boquilla era su marido desaparecido.
Precisó que su compañero tenía tatuado un Yin Yang en el hombro izquierdo, con la letra “M” abajo de este, y otro más en el antebrazo izquierdo, con el nombre Melanie.
Los peritos le confirmaron que uno de los cadáveres tenía esas características. Luego, la mujer reconoció el cuerpo.
Es Frank, de 35 años y oriundo de Venezuela, uno de los dos hombres hallados muertos, quienes se cree fueron asesinados tras recibir golpes contundentes en la cabeza.
Después de confirmar la tragedia, empezó el dolor para los parientes de Frank, quienes están sumidos en un mar de dudas. ¿Lo asesinaron junto al otro hombre por robarle la moto, fue un ajuste de cuentas, los torturaron por un problema personal? Esos serán los interrogantes que deberán resolver las autoridades, que hasta ahora desconocen los móviles del doble crimen. Los familiares de Porto aseguran que no conocen al otro hombre asesinado.
Buscando mejor suerte
Frank llegó a Cartagena hace 5 años en busca de mejores oportunidades. Dejó su natal Venezuela y se estableció con su mujer y sus tres hijos en el barrio Nuevo Bosque.
Su esposa cuenta que viajaba frecuentemente a su país natal y que desde hace un tiempo no encontraba trabajo. Por eso, decidió dedicarse al mototaxismo en Cartagena, labor que ejercía desde hace 4 meses.
“El domingo salió en la mañana y no llegó a almorzar, y me preocupé mucho porque tampoco llegó a dormir. Ayer -lunes- en la tarde me preocupé más cuando escuché que habían hallado a dos hombres muertos en La Boquilla. Tuve un mal presentimiento, no sé por qué. Hoy -ayer- vi la placa de su moto en las noticias y eso me llevó a comprobar que era él uno de los dos muertos. De la causa de la muerte aún no nos dicen nada. Tampoco sabemos por qué le hicieron eso, él no tenía problemas ni amenazas”, concluyó la mujer del mototaxista. Las autoridades tratan de establecer la identidad del otro hombre asesinado.
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