Diego Alfonso Díaz se llamaría el hombre al que el domingo en la noche hallaron muerto en una finca que está en inmediaciones de la ciénaga de Cholón, en Barú.
El hombre era antioqueño y se conoció que trabajaba como vigilante en el predio donde lo encontraron muerto. Se dice que tenía heridas de arma blanca, pero quién o por qué lo atacó. Unos rumoran que se trató de un atraco y otros que fue una riña, pero hasta ahora no hay nada cierto.
“Se sabe que trabajaba como vigilante de esa finca hace tres días. Estamos investigando qué sucedió”, manifestó el teniente coronel Harry Pobón, comandante del Tercer Distrito de la Policía Metropolitana de Cartagena.
El cuerpo de la víctima fue llevado ayer en la madrugada a la morgue de Medicina Legal en el barrio Zaragocilla. Hasta ayer en la tarde no llegaban parientes del vigilante a la sede del instituto a reclamarlo.
De otra parte, está el deceso de José Luis Araque Sanmartín. El 4 de abril pasado, el vendedor ambulante estaba en la entrada de su casa, en la calle El Carmen del barrio La Esperanza, cuando le llegó la mala hora. Dos sujetos en una moto llegaron al lugar. El parrillero bajó y llamó por su nombre a José, quien fue a atenderlo. Apenas el desconocido lo vio, le dio un balazo en un pómulo al vendedor ambulante.
Araque pudo refugiarse en su casa y su agresor huyó. Al herido lo llevaron al CAP de La Esperanza y de allí fue trasladado a la Clínica Crecer. Con los días mostró mejorías, pero luego su estado empeoró y murió ayer de madrugada. Se desconocen los móviles del ataque.
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