Vecinos y familiares de Jefry José Muñiz Gamarra creen que el que siga con vida es un milagro de Dios.
El joven, de 20 años, permanece sedado en una camilla de la Clínica San Juan de Dios desde el domingo en la tarde. Ese día le hicieron una delicada operación en la que tuvieron que quebrarle un pedazo del cráneo para poder extraerle la navaja que horas antes un sujeto le enterró en la cabeza en medio de una riña, en el barrio José Antonio de Sucre. El hecho ocurrió el domingo en la mañana, a pocas cuadras de la vivienda del herido, en la manzana M.
Jefry trabaja en una empresa en el área de servicios generales y el sábado en la noche salió con unos amigos, con los que departió en una tienda del barrio hasta la mañana del domingo. “Eran las siete de la mañana cuando llegó Roberto y empezó a buscarle pelea a varios, pero luego se la montó a Jefry. Empezó a decir que iba a matar al que sea. Luego, le dijo a Jefry que su hermana era una perra porque le había metido cachos al hermano de él - de Roberto-. Por eso empezó la pelea. Roberto le cortó la cara a Jefry con una botella y luego le enterró una navaja en la cabeza. Después huyó”, relató Calixto Paz, padrastro del herido. Al joven lo llevaron a la Clínica San Juan de Dios. Está sedado y esperan despertarlo mañana. Se encuentra estable.
Calixto Paz, padrastro de Jefry Muñiz, espera que este reaccione bien a los procedimientos quirúrgicos que le han hecho y se recupere.
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