Cuando ocurrió el demencial ataque de los niños apuñalados por su padre en el municipio de Sincé, la madre de los pequeños se hallaba tomando cerveza con un familiar.
Los menores, una niña de 8 años y un niño de 11, se hallaban en compañía de dos tíos, pero estos no pudieron hacer nada para evitar que fueran apuñalados por Oswaldo Ortega Martínez.
Cuando los tíos de los niños escucharon los gritos de los infantes, ya habían sido apuñalados por el mencionado hombre de 39 años de edad, natural y residente en Sincé.
La madre había sido invitada a tomar cerveza por un tío suyo y regresó a eso de las 11:00 de la noche del domingo, percatándose del resultado de la acción de su pareja contra sus hijos.
Según la mujer esto se presentó porque el presunto agresor no quería irse de la casa de su abuela en donde vivían juntos, pese a que ella, desde hacía seis meses, no quería vivir más con él.
Johana Acosta, como fue identificada la mujer, nunca pensó que su pareja iba a cometer semejante acto criminal, pues no había mostrado ser una persona agresiva con los niños ni con ella.
Al parecer, el hombre creyó que la mujer estaba teniendo otra relación y en un ataque de celos, después de varias cervezas, fue y atacó con un cuchillo a su propia hija y a su hijastro.
Al agresor, tras ser sometido a las audiencias preliminares, le dictaron medida de aseguramiento y su defensa aduce que sufre de trastornos psicológicos.
Ortega Martínez, quien luego del ataque intentó suicidarse, no aceptó los cargos por lesiones personales agravadas imputados por la Fiscalía General de la Nación.
Por su parte, los niños están fuera de peligro, pero continuarán ingresados en la clínica la Concepción de Sincelejo, toda vez que la niña sufrió ocho puñaladas y el niño una lesión en un pulmón.
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