De varios machetazos fue asesinado un bolivarense ayer en la madrugada, en un barrio de la ciudad de Valledupar (Cesar).
El occiso fue identificado como Yesid Tapias Pabón, de 23 años, natural de Calamar (Bolívar) y residente en la invasión Tierra Prometida, al sur de Valledupar, donde se ganaba la vida como técnico en arreglo de teléfonos celulares.
Los familiares de Tapias Pabón contaron que, en la tarde del sábado, se encontraba descansando en su casa, cuando aparecieron unos amigos, quienes le llevaron un celular para que lo reparara.
Luego de haber cumplido con el encargo se fueron a jugar billar y, posteriormente, llegaron a una cantina del vecino barrio Mareigua, llamada “Estadero Club”, donde se pusieron a consumir licores.
Se supo que Tapias Pabón también se hacía acompañar de un hermano de 17 años.
Siendo, aproximadamente, la una de la madrugada, el dueño del estadero se dispuso a cerrarlo, cuando Yesid Tapias le pidió que lo complaciera con una canción de Diomedes Díaz, pero el cantinero se negó.
Al parecer, la negativa enfureció a Tapias Pabón, quien comenzó a gritar improperios contra el comerciante, y luego rompió una botella a manera de amenaza.
El cantinero, quien se encontraba solo, hizo una llamada por celular a sus hermanos, quienes viven cerca del establecimiento.
Luego se presentaron los tres hermanos enfurecidos. Uno de ellos, identificado como Juan David, portaba un machete y, tras abalanzarse contra Yesid Tapias, le causó una herida abierta en el hombro derecho, que le afectó la vena aorta y consiguiente desangre en cuestión de minutos.
Asabaris Tapias Pabón, otro hermano de Yesid, relató que el presunto homicida también agredió al menor de 17 años, propinándole un planazo en la espalda cuando intentó intervenir en la gresca.
“Me dijeron que mi hermano, cuando observó que lo iban agredir con el machete, trató de correr, pero fue alcanzado por el agresor. Después que lo machetearon, corrió unos 15 metros para evitar que lo continuaran agrediendo y se desmayó”, explicó.
El menor lo trasladó en una motocicleta al “Hospital Eduardo Arredondo Daza”, del barrio San Martín, al cual llegó sin signos vitales, según dictaminó el médico de turno.
Minutos después del crimen, la Policía capturó al presunto agresor en su casa del barrio Mareigua, donde se había escondido.
Juan David inicialmente negó haber participado en el hecho de sangre, pero fue reconocido por testigos y de inmediato lo trasladaron a las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía.
Se supo que, en las próximas horas, la Fiscalía legalizará la captura e imputará cargos durante una audiencia pública en el Palacio de Justicia de Valledupar.
Yesid Tapias Pabón había llegado hacía seis meses a Valledupar con su familia paterna, huyendo de la violencia de los Montes de María. Era el séptimo de ocho hermanos, soltero y sin hijos.
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