Pedro Manuel Ortiz cuidaba hace algunos días la casa de un tío en Getsemaní, en la calle La Aguada. El inmueble, que está frente a la Plaza del Pozo y en cuya pared frontal está el nombre Casa Pizarro, fue dejado a su cargo y todo parecía marchar bien hasta ayer en la madrugada, cuando allí sucedió un hecho violento.
Las versiones que el joven dio a la Policía Metropolitana de Cartagena dejan ver que eran las 2:30 a. m. cuando en medio de la oscuridad escuchó unos fuertes ruidos dentro del lugar.
Pedro Manuel habría presentido que algo andaba mal y por eso se habría armado con un cuchillo para ver si un intruso había ingresado al lugar que cuidaba. Las sospechas fueron acertadas y dentro halló a un hombre que, presuntamente, ingresó a la casa a robar.
Pedro se trenzó en una lucha con el sujeto. Vecinos del sector indicaron a la Policía Metropolitana que escucharon una discusión y gritos. En medio de la lucha, Ortiz terminó clavándole el cuchillo en el cuello al intruso, quien se dice tiene aspecto de ser un habitante de la calle.
Herido, el presunto ladrón se desplomó y quedó tendido al interior de la vivienda. Ante el hecho, Pedro llamó a la Policía a avisar de lo ocurrido.
Sin dolientes
Policías del cuadrante llegaron al lugar a verificar la información y confirmaron el hecho. “Los uniformados encontraron al hombre herido y llamaron a una ambulancia. Paramédicos llegaron y le prestaron los primeros auxilios al hombre herido, pero ya no tenía signos vitales, se desangró”, informó la Policía Metropolitana.
Los uniformados atraparon a Pedro, quien luego fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación, mientras que el cadáver del presunto ladrón fue llevado a la morgue de Medicina Legal en Zaragocilla, luego que miembros de la Sijín realizaran la inspección técnica de este.
Del hombre muerto se sabe que tenía entre 25 y 30 años, y que es de tez trigueña. Tiene el cabello negro y mide 1,70 metros. La Policía confirmó que al revisarlo no le hallaron documentos de identidad, por lo que su cuerpo permanece en la morgue como NN (persona no identificada). Hasta ayer, no aparecían parientes del difunto.
Peritos de Medicina Legal trabajan en la identificación del hombre muerto a través de sus huellas dactilares.
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