Es inexplicable el daño psicológico y físico que genera un maltrato en una mujer y, aún más, en una niña. No ríen igual, no hablan de la misma forma y mucho menos sienten igual. Esto fue lo que presuntamente le sucedió a una menor de 8 años en el barrio Santa Rita. La menor manifestó ante las autoridades que era tocada en sus partes íntimas por un vecino, en repetidas ocasiones. Además habría indicado que su madre y su abuela tienen conocimiento del caso, pero no denuncian.
Ahora las autoridades investigan los hechos y tratan de dar con el paradero del agresor.
Así se dieron cuenta
El lunes 12 de junio, a las 10:20 de la noche, la menor llegó hasta el CAP de La Esperanza en compañía de una tía. Cuando la atendieron aseguraron que la niña tenía un dolor vaginal y molestias al momento de caminar. Lo primero que sospecharon los médicos fue un presunto caso de abuso sexual, pero debían verificarlo. Según un vocero de la Secretaría del Interior, al día siguiente en la mañana, la niña fue remitida a la clínica Higea en Amberes y la atendió la doctora Nauris Hernández.
El diagnóstico
Tras el examen a la menor, los médicos informaron de varias anomalías en su cuerpo. Incluso, una quemadura de segundo grado en el dedo ‘corazón’ de la mano izquierda. Eso evidenció el maltrato al que la menor fue expuesta.
“La niña está sin un representante legal en la clínica y también explicó que un sujeto que es, vecino, le toca sus partes íntimas”, dice un informe conocido por Q’hubo.
Algunos vecinos del barrio aseguraron que la situación ya ha sucedido varias veces, pero que sus familiares no denuncian.
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