Un muerto fue el resultado de un accidente de moto en el municipio de Turbaco, hecho que ocurrió en la madrugada de ayer.
La persona muerta, quien conducía el citado vehículo, respondía al nombre de Harold Andrés Ruiz Morales, un soldado profesional, quien prestaba sus servicios en la ciudad de Popayán y en estos días disfrutaba una licencia en el sector Mamellal, de Turbaco, tiempo que aprovechó para compartir con sus familiares a quienes no veía desde hacía 6 meses.
La familia de Ruiz Morales manifestó no tener mayores del accidente. Por su parte, la Policía de Carreteras informó que los agentes se percataron del accidente a las 5 de la mañana de ayer.
Se supo que el joven se desplazaba en una moto de placas NYP-12A en sentido Turbaco-Arjona, Kilómetro 89, sector Villa Marta.
Al parecer, de acuerdo con las autoridades, conducía a alta velocidad y perdió el control del vehículo, luego de chocar contra un poste o una señal de tránsito, lo que ocasionó que se saliera de la carretera y cayera sobre un costado de la vía.
Su muerte fue instantánea, pues sufrió fuertes golpes en la cabeza y en la columna. Se presume que el accidente pudo haber ocurrido a las 4 de la madrugada cuando Ruiz Morales iba en compañía de otras personas en plena carretera Troncal de Occidente.Sin embargo, el cadáver fue descubierto con las primeras luces de la mañana de ayer.
Parientes del hoy occiso contaron que hace dos años también hubo un luto en la familia, pues había fallecido la madre de Harold Ruiz, Aliris Revolledo Morales, víctima de un cáncer.
Relataron también que, en estos días, el soldado estaba contento, porque había aprovechado sus días de descanso para disfrutar con su familia, pues constantemente les manifestaba, a través de llamadas y mensajes por celular, que los extrañaba muchísimo, ya que no los veía desde noviembre de 2015.
El pasado miércoles llegó a Turbaco y no se despegó de los suyos.
El viernes disfrutó del partido de Estados Unidos ante Colombia en la Copa América de Fútbol, junto con sus hermanos y su papá. Una vez terminada la justa, la emoción lo embargó tanto que salió a celebrar.
Dijo su hermano que se tomó dos cervezas y después llegó donde una tía en el barrio Pumarejo. Allí charló por varios minutos con unos amigos. A la media noche volvió a su casa, en el sector El Talón de Mameyal, al parecer a buscar algo y volvió a salir siendo las de 12 de la noche. Esa fue la última vez que lo vieron.
Harold Andrés Ruiz llevaba un año y medio en el Ejército.
Sus licencias eran de 15 días y solía regresar cada 6 meses, desde que estaba viviendo en Popayán. Sus honras fúnebres se llevarán a cabo hoy.
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