Un procedimiento contra el ruido, en el que uniformados hacían cumplir el nuevo Código de Policía, terminó en una confrontación con la comunidad, que dejó a su paso sangre y muerte. El hecho ocurrió el domingo en el barrio Henequén, y en este mataron a John Freddy Recuero Cabarcas, quien recibió impactos de bala. Así mismo, salieron heridos otros dos civiles y un policía. La familia de Recuero Cabarcas asevera que quien le disparó habría sido un policía, pero eso aún no está claro y la Fiscalía se encarga de realizar las investigaciones para esclarecer lo ocurrido.
Las versiones
John Freddy tenía 20 años y residía con su mujer, quien tiene 7 meses de embarazo, en el sector 17 de Mayo de Henequén. Sus parientes cuentan que el domingo, al caer la noche, se fue a un baile de picó, a cuatro cuadras de su casa. Dicen que cuando estaba en el lugar, policías llegaron y pidieron a los organizadores del baile que le bajaran el volumen al equipo, y luego se marcharon.
Pese a la advertencia, volvieron a subir el volumen al equipo. Instantes después, a las 9:30 p. m., los uniformados regresaron a apagar el picó y se armó la confrontación entre los uniformados y la comunidad, en la que terminó muerto Recuero Cabarcas. Resultaron heridos una menor y John Jairo Vergara Cabarcas, quien está internado en la UCI de la Clínica Madre Bernarda, porque el balazo que recibió le perforó el hígado. También salió herido un policía.
Por un lado, el general Luis Poveda, comandante de la Policía Metropolitana, indicó que los policías fueron a apagar el picó tras atender el llamado de la comunidad, que indicaba que el picó sonaba a alto volumen desde la mañana de ese día.
“Policías del cuadrante fueron y pidieron refuerzos a otras unidades. Los policías quitan la música y por eso son agredidos por las personas que estaban allí, algunas en estado de embriaguez, que utilizaron armas blancas, piedras y botellas. Los funcionarios dicen que hubo disparos hacia la Policía. Los policías responden a este actuar de estas personas. Lamentablemente hay un hecho que encierra dentro de nosotros un dolor, frente a la muerte de una persona. Vemos que hay una agresión y una falta de respeto contra nosotros los uniformados en el cumplimiento de nuestro deber”, señaló el general Poveda.
Por el otro lado, está la versión de los parientes de John. “Los policías llegaron a apagar el picó y de inmediato comenzaron a tirar piedras, provocando. De inmediato, todo el mundo salió corriendo, igual John. Él se metió por un callejón, pero un policía le dio un balazo en una pierna y lo tumbó”, indicó un allegado del joven. Según esta misma persona, el uniformado se habría acercado a Recuero y le habría dado otros tres balazos. Así mismo, aseguró que el policial sería el mismo que hace unas semanas lo habría amenazado de muerte luego de hacerle una requisa al encontrarlo en una esquina. La pelea duró varios minutos y a John, quien deja una hija, lo llevaron al CAP de Arroz Barato. Allí llegó muerto. “La Policía recolecta pruebas para la justicia penal militar, para disciplina en la Policía y tomar las medidas que en el caso hubiere, toda vez que se halle responsable a los policías de la comisión de este hecho”, concluyó el general Poveda.
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