Mayores detalles siguen revelando los testigos de la Fiscalía General de la Nación sobre el escabroso crimen de la joven embarazada Kellys Zapateiro Guzmán.
En una nueva audiencia de juicio oral, testificaron cuatro agentes de la Policía Nacional, entre ellos un compañero y amigo del expatrullero Andrés Díaz Zabaleta, acusado de cometer el atroz homicidio junto a su esposa Josefa Cardona Ortega.
El testigo es un patrullero que vivía en la Estación de Policía de Manzanillo del Mar y se encontraba en ese sitio la noche de los hechos. El uniformado, con siete años de experiencia, narró al juez que no estaba de turno y no alcanzó a percatarse de lo que sucedía pues se encontraba descansando en su habitación.
“Tengo claro lo que pude observar esa noche, llegué (a la estación de policía) y cuando voy subiendo me doy cuenta que los focos estaban apagados, eso no era normal”, indicó el testigo.
“Me quedé viendo televisión y hablando por celular, como a eso de la una de la madrugada escuché un disparo, uno solo, y me quedé esperando, como no escuché más y mi compañero no vino a avisarme nada, seguí chateando”, añadió.
El agente explicó que no se levantó y no salió del cuarto porque “era costumbre” de Andrés Díaz Zabaleta hacer disparos al aire o para matar algún animal.
Al proseguir con su testimonio, el patrullero aseveró que una hora después se levantó para ir al baño y escuchó música que provenía de un bohío de la estación.
“Veo la silueta de una mujer, tenía una pala de esas de recoger basuras. Atrás del bohío veo una candela”, sostuvo el agente, anotando que no sospechó nada extraño, pues creyó que su compañero estaba quemando basuras, como acostumbraba a hacerlo.
Además sostuvo el testigo que Josefa Cardona Ortega acudía a esa estación, en promedio cada 15 días, y dijo que él fue muy allegado al ahora acusado. “Desde que entré a la policía, fue él quien me enseñó a ser policía, compartimos en la misma patrulla y los mismos turnos”.
Agregó que se enteró de lo sucedido al día siguiente, el 12 de julio, cuando a la estación se acercaron agentes de la Sijín para realizar investigaciones.
EL PERMISO DE ANDRÉS
En el juicio otro de los testigos, responsable de grabar radiocomunicaciones de la policía, reveló el audio de la conversación que sostuvo Díaz Zabaleta esa noche, para solicitar permiso pues su mujer Josefa Cardona acababa de dar a luz. “Mi esposa acaba de dar a luz, para que me colabore, el bebé nació prematuro de ocho meses y con problemas, está en la Casa del Niño”, dijo Díaz Zabaleta a su superior.
También testificó una agente que esa madrugada recibió una llamada en la línea de emergencia de la policía, en la que Josefa pedía que le avisaran a su esposo que acababa de dar a luz y estaba en la clínica. La Fiscalía demostró que esta última llamada se hizo desde el mismo teléfono de Andrés. Además declaró un agente que reemplazó al ahora acusado en su turno, luego de que este pidiera permiso.
La Fiscalía acusa a Cardona Ortega y Díaz Zabaleta de haber asesinado a Kellys Zapateiro Guzmán, en el bohío de la estación de policía, para robarle al bebé de ocho meses que llevaba en su vientre. Ambos se negaron a asistir al juicio por los delitos de homicidio agravado, desaparición forzada y secuestro simple, el cual continuará el próximo 17 de marzo con más de declaraciones de testigos de la Fiscalía, de los que hasta ahora han declarado 15.
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