Úrsula Abreo está indignada. Fuera de afrontar las pérdidas del incendio que devoró su vivienda el domingo, a las 5 de la tarde, en la carrera 5 de Simón Bolívar, debe que afrontar las que dejaron personas inescrupulosas, que mientras simulaban ayudar ese día, hurtaron joyas, dinero, unos 140 cuadros (pinturas), y hasta le vaciaron la nevera. La mujer dice que solo en las cosas que robaron, la suya y otras dos familias que viven en la misma vivienda, perdieron al menos unos $80 millones.
La comerciante contó que todo sucedió el domingo cuando estaba en el patio de su casa. “De pronto los vecinos empezaron a gritar que salía humo por el techo de la casa. Entré y cuando abrí el cuarto donde duerme mi nieto, al cual tenía cargado en esos momentos, vi que las llamas consumían el cielo raso y se regaban por toda la casa. Vecinos llegaron y empezaron a apagar el fuego con arena y agua. Unas 200 personas llegaron a la casa y algunos aprovecharon para robar. Luego, llegaron la Policía y los Bomberos, que apagaron las llamas. Parece que fue un corto el que causó el incendio”, indicó Úrsula. Por otro lado, un incendio provocado por carbones a medio apagar devoró 8 cabañas en Playa Blanca, en la isla de Barú.
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