El ambiente era tenso ayer en la urbanización Flor del Campo. Decenas de policías custodiaban el CAI del sector, pues había rumores de una asonada.
El CAI querían apedrearlo amigos de Orlando Galán Silgado, quien cuando apenas empezaba la mañana, a las 6:30, fue baleado por un policía en la manzana 3 de Flor del Campo. Recibió un balazo en un ojo que lo tiene entre la vida y la muerte en la Clínica Madre Bernarda.
Por un lado, la Policía indicó que Orlando resultó herido al enfrentar a uniformados que, presuntamente, lo sorprendieron atracando a un vecino del sector. Por otro, la familia del herido asegura que no estaba atracando y que fue un ataque injustificado.
El hecho del que señalan a Orlando, de 19 años, ocurrió muy cerca del CAI del barrio.
Según la Policía, uniformados lo sorprendieron cuando intentaba atracar a un hombre que vive en Villas de Aranjuez, a quien le habría partido una ceja golpeándolo con la cacha de un revólver. La Policía explicó que dos uniformados que patrullaban el sector lo sorprendieron y Orlando los habría enfrentado, hecho en medio del cual le dieron el balazo. Luego, fue llevado por parientes a la Clínica Madre Bernarda.
Otra es la versión de la familia de Orlando. “Él es albañil y estudia en las noches.
Todo pasó cuando mi hijo salió de nuestra casa a sacar un pajarito y ahí pasaron dos policías que estaban persiguiendo a unos rateros. Al ver a mi hijo, se metieron con él y querían entrar a la casa, pero como él no los dejó cogieron rabia.
Discutieron y luego mi hijo salió corriendo y ahí fue que le dispararon.
Él no estaba robando. Los médicos no lo han operado porque la bala le afectó el cerebro y tienen que esperar que se le desinflame. Está delicado”, relató Eduarda Galán Silgado. El caso está en manos de la Fiscalía General, que se encargará de proseguir con la investigación para esclarecer la situación.
Caso parecido
El hecho se da solo un día después de que un expolicía matara de un balazo en el tórax a Darwin Garcerant en Nuevo Bosque, tras indicar que este quería hurtarle su moto. Ayer, parientes de Darwin llegaron a la morgue de Medicina Legal a reclamar su cuerpo e indicaron que vivía en el sector Primero de Mayo de El Pozón, junto sus tres hijos y su mujer, que está embarazada.
Según los familiares de Darwin, este trabajaba como mototaxista. “Realmente no sabemos cómo lo mataron.
Llegué de Bucaramanga y estamos investigando qué pasó. Él no era atracador, el caso lo vamos a poner en manos de un abogado”, dijo un pariente de Darwin.
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