Con el despliegue de la operación “San Andrés”, miembros del Gaula de la Policía Metropolitana de Cartagena capturaron a cuatro integrantes de una familia, quienes conformarían una estructura de extorsionistas, que, mediante intimidaciones a un reconocido arquitecto del interior del país, y amenazas de muerte contra miembros de su familia, lo habrían despojado de 31 millones de pesos.
Las constantes exigencias de los delincuentes a través de llamadas a celular y mensajes en redes sociales, cada vez con mayores requerimientos económicos, que en menos de un año alcanzaron los 31 millones de pesos, obligó a la víctima a denunciar estos hechos ante los miembros del Gaula de la Policía Metropolitana de Cartagena.
Un riguroso procedimiento metodológico permitió recaudar material probatorio suficiente que demostrarían la supuesta comisión de la conducta delictiva. Según las autoridades los sujetos con con fotos amenazaban a la víctima de afectar la relación sentimental con su esposa e hijos por una supuesta infidelidad; bajo esta amenaza le realizaban constantes exigencias extorsivas.
Los sindicados fueron capturados en dos diligencias hechas en los barrios Los Caracoles y Zapatero por miembros del Gaula de la Policía, en conjunto con Fiscalía 52 Local. A estas personas se les imputará el delito de extorsión agravada y concierto para delinquir agravado.
Al finalizar las audiencias ante un Juez de Control de Garantías, que otorgó la legalidad de los procedimientos de captura, registro y allanamientos, imputación de cargos y solicitud de medida, el juez tomó las siguientes decisiones: Miguel Alexander Gómez Marrugo, alias “Migue Talento”, de 30 años, fue cobijado con detención preventiva en centro carcelario, Manuel de Jesús Gómez Marrugo, de 34 y Rosi Marelvi Marrugo Castillo, cobijados con detención domiciliaria, y una mujer de 24 años de edad, fue dejada en libertad, pero continuará vinculada al proceso.
Los capturados habrían recibido el pago de las extorsiones a través de reconocidas empresas de giros.
Es importante destacar que Miguel Gómez, contaba con capacitación técnica como investigador judicial y criminalista, obtenida en una reconocida institución de educación superior, los cuales empleó para realizar seguimientos y obtener información de vital importancia para las amenazas e intimidaciones a la víctima.
Inclusive habría elaborado documentos con el objetivo de evadir el proceso de investigación por extorsión, presentando falsos pagares y contratos entre personas naturales, para eludir su responsabilidad en las extorsiones que venía ejecutando.
Uno de los hechos que llamó la atención de los investigadores del Gaula fue un documento firmado y notariado por los presuntos extorsionistas y entregado a la víctima, simulando ser un pagaré, donde le anuncian que con este pago ya no volvería a recibir llamadas amenazantes o extorsivas, y próximamente le entregarían un paz y salvo que garantizaría que sus familiares no serían molestados.
Las exigencias extorsivas iniciaron a finales de 2014, luego que la víctima viajó a Cartagena en plan de negocios y pasó un fin de semana en Playa Blanca, contactando al conductor de un taxi que habría ganado su confianza por otros desplazamientos realizados en la ciudad, y a quien le comentó sobre sus ingresos, actividad económica y viajes al exterior. El conductor le presentó a otros familiares y se tomaron fotos con él departiendo en la playa con una mujer, elementos que fueron utilizados posteriormente para extorsionarlo.
El Gaula invitó a la ciudadanía a denunciar las extorsiones en la línea gratuita 165 y a los teléfonos 6561492 y 3213942771 del Gaula de la Policía Metropolitana de Cartagena o se acerquen al barrio Crespo a la calle 3 No. 1 a 13, a poner en conocimiento estos hechos.
Las autoridades hacen un llamado a tener en cuenta que pagar una extorsión no es garantía de que lo van a dejar tranquilo, sino que es el comienzo para seguir intimidándolo.
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