Plácidamente dormía Luz Marina Díaz, cuando a la una de la madrugada de ayer su hijo John Jairo Ortega Díaz llegó a su casa, en el sector Marlinda de La Boquilla. Se acostó junto a su madre luego de regresar de una fiesta, pero no pasó mucho tiempo cuando le dijo que no sabía dormir con ella, y que se iba para la casa de su mujer, en el barrio Villa Gloria.
Luz presintió que algo malo podía pasarle al mayor de sus tres hijos y por eso le dijo varias veces que no saliera, que era muy tarde y podría encontrar un peligro en la calle. Pero el joven, de 20 años y a quien apodaban ‘Pito Loco’, no hizo caso y partió. La muerte aguardaba por él en la penumbra, mientras iba camino a la casa donde residía con su mujer, quien es la madre de su único hijo, un menor de 3 años.
John había recorrido quince metros, en un camino que lleva a la playa. Luz iba tras él para detenerlo cuando vio pasar a dos sujetos en una moto. Solo el parrillero, un hombre alto y de contextura gruesa, llevaba casco puesto. Los desconocidos alcanzaron a Ortega Díaz y el parrillero bajó del vehículo, mientras su compinche aguardaba en un sector oscuro. Luz Marina pudo ver cuando el sujeto sacó un arma de fuego y en repetidas ocasiones le disparó a su hijo John, quien corrió. “Me podían ver, así que me escondí detrás de un muro. Cuando los sicarios se fueron, fui a ver dónde había quedado mi hijo”, relató entre lágrimas la madre.
Muere en sus brazos
Muy cerca de la orilla de la playa, Luz encontró tendido a John. Se postró junto a él y luego lo abrazó. John agonizaba por los ocho balazos que acababa de recibir en distintas partes y nada pudo hacer su progenitora. Su primer hijo, ese que un día salió de sus entrañas, murió en sus brazos. La mujer no paraba de llorar y unos instantes después llegaron parientes y familiares. También la mujer de la víctima, quien tiene cinco meses de embarazo. Luz abrazaba el cuerpo de su retoño y solo lo soltó casi tres horas después, cuando llegaron miembros de la Sijín a realizar la inspección técnica del cadáver, llevándolo a la morgue de Medicina Legal.
La madre del difunto dice que este no tenía amenazas, por lo que desconoce el motivo del asesinato. “Él no tenía problemas ni amenazas, si había tenido peleas pero eso fue hace mucho tiempo”, dijo la mujer. Sin embargo, las indagaciones de la Policía Metropolitana de Cartagena dejan ver que desde hace unos días John tenía problemas porque lo señalaban de ser el supuesto responsable del robo de una moto. Las autoridades investigan si el homicidio habría tenido algo que ver con esa situación. La Policía Metropolitana también confirmó que Ortega Díaz tenía dos anotaciones por el delito de porte o tráfico de estupefacientes.
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