Ocho días después de la desaparición de un estadounidense tras volcarse una lancha en las Islas del Rosario, en el sector de Periquitos, la búsqueda sigue y se ha extendido a las zonas costeras, en donde las Unidades de Superficie de la Armada están pendientes.
Así lo informó ayer a El Universal el comandante de Guardacostas del Caribe, capitán de fragata Octavio Gutiérrez, al indicar que los esfuerzos siguen intactos.
El extranjero es empleado de la embajada de Estados Unidos, de quien se desconoce la identidad pues las autoridades han preferido mantenerlo en reserva por petición de los familiares.
Con esta tragedia ya van siete accidentes marítimos en 55 días, en la zona insular de Cartagena, recordando que en 2019, el 30 de noviembre, una joven barranquillera murió al ser golpeada con las hélices de un yate mientras flotaba en la Ciénaga de Cholón -Isla de Barú-.
Según testigos, la víctima, Valentina González Suárez, de 20 años, estaba con su novio y unos amigos cuando decidió entrar al agua para flotar. Al poco tiempo, otros turistas escucharon unos gritos y al ver hacia el mar solo distinguieron una mancha roja, pero al acercarse vieron el cuerpo de la joven flotando bocabajo con heridas en la cabeza, cuello y la espalda.
El 7 de enero ocurrió otra emergencia en Isla de Barú, en la que dos hermanos, de 50 y 54 años, se desplazaban en un flotador halado por una lancha cuando otra los golpeó.
Julián Casasbuena sufrió fractura del maxilar superior izquierdo, perdió varias piezas dentales y tuvo lesiones en un brazo y en la pierna izquierda. Mientras que su hermano, Mauricio, resultó herido en una mano y una pierna.
Las alertas de las autoridades se prendieron luego que ocurriera otro accidente entre dos lanchas, en la bahía interna de Cartagena. Afortunadamente nadie salió herido. A los dos días -12 de enero-, un video dio a conocer el choque en la orilla de las aguas de Playa Blanca, entre una lancha y un jet sky. En la moto acuática se movilizaban dos hombres, uno de ellos cayó abruptamente contra el bote.
El miércoles pasado, una niña de 10 años resultó herida al chocar con un hombre mientras iba en una atracción acuática (gusanito).
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