La tranquilidad del barrio Daniel Lemaitre se interrumpió a eso de las 11:45 p. m., del viernes. Cuatro disparos se escucharon y todos los que estaban en el sector 20 de Julio corrieron, unos a sus casas para resguardarse de las balas y otros querían ver qué había pasado.
Entre los que fueron a mirar, estaban los familiares de Crisanto Waisgmae Echeverría Betancourt, quien había sido la víctima del ataque de sicarios.
“Nosotros escuchamos los tiros y fuimos a mirar. Yo mismo monté a mi hermano en el carro y lo llevé a la clínica”, expresa un familiar, aún angustiado por el deceso de su ser querido.
Según familiares de Crisanto, él se dedicaba a prestar plata y las personas que lo atacaron le quitaron 1 millón 400 mil pesos .
“No le quitaron más nada, solo la plata, hasta el celular le dejaron”, dijo otro allegado consultado.
Los familiares de la víctima dicen que lo trasladaron a la Clínica San José de Torices donde, a pesar de los esfuerzos médicos, fue imposible salvarle la vida.
Crisanto Echeverría deja un hogar conformado por su mujer y sus 3 hijas, quienes ahora tienen que sentir la extraña compañía de una ausencia y la soledad que les hace darse cuenta de que su padre no estará más con ellos para ayudarlos a salir adelante.
El viernes fue día sin moto. Testigos aseguran que el victimario iba a pie y que tras dispararle al prestamista, salió corriendo.
“Imagínate, era día sin moto, el atacante estaba a pie”, comenta.
Echeverría Betancourt tenía 49 años y, según su hermano, recibió un impacto de bala en uno de sus dedos, otro en la parte derecha del abdomen, y dos en la espalda.
Saulo, hermano de la víctima se queja porque la seguridad en el sector 20 de Julio cada vez es peor, ya que atracan constantemente.
“No es buena la seguridad de un tiempo para acá”, dice, al mismo tiempo que asegura que su hermano estaba solo al momento de recibir el ataque.
La familia de Crisanto sigue a la espera de que la Policía entregue una versión de los hechos y que las investigaciones de las autoridades puedan dar con el autor del crimen, que hoy tiene llorando a toda una familia, sin entender por qué mataron al hombre, si para todos era alguien sin problemas y sin ningún tipo de amenazas.
Lilian Holguín, esposa de Crisanto, lamenta la muerte de su marido y pide justicia.
“Llevábamos 18 años juntos. No entendemos por qué lo mataron porque él era un buen hombre”, expresa la desconsolada mujer.
ASESINATO EN PASACABALLOS
Aproximadamente a las 8 a. m., de ayer, en la trocha conocida como El Bajo Tigre, en inmediaciones del sector la ladrillera, en Pasacaballos, fue encontrado el cuerpo sin vida de un hombre que fue identificado como Octavio Castro Bello.
Según las autoridades, el hombre, de 38 años y quien se ganaba la vida como mototaxista, fue hallado con heridas en distintas partes del cuerpo producto de disparos.
Versiones de habitantes de la zona, expresan que se escucharon el sonido de los balazos a eso de las 6:30 a. m. Al momento de ser encontrado el cuerpo, tenía dos cascos en uno de sus brazos y la moto en la que se transportaba, marca Auteco Bóxer CT 100 color roja, de placa ZVZ-87A, se la habrían llevado los mismos que lo atacaron.
Las autoridades investigan si la víctima cogió una carrera que pidió que lo llevara hasta la trocha o si, tras asesinarlo, lo llevaron hasta el lugar.
El cuerpo de Octavio Castro fue hallado con varias heridas de bala en su cuerpo.
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