Una serie de hechos violentos se desató en la ciudad, entre la tarde del jueves y la mañana de ayer. En menos de 14 horas, tres hombres fueron asesinados en hechos aislados, que ocurrieron en Villa Hermosa, El Bosque y Turbaco.
Precisamente, en este municipio vecino ocurrió la primera de las tragedias y la víctima fue José Carlos Osorio Beltrán, quien era dueño de una empresa dedicada a la instalación de redes de gas. El hombre vivía con su esposa y sus hijos en el barrio Alameda La Victoria. El jueves, a las 2 de la tarde, salió de su casa en una camioneta, marca Chevrolet Captiva. Le dijo a un hijo que iba a Turbaco a hacer un trabajo.
Las horas fueron pasando y a las 5 de la tarde su hijo lo llamó a preguntarle dónde estaba. José le indicó que estaba en Turbaco haciendo el trabajo y que en un momento terminaba y regresaba a casa. Pero no fue así.
Solo una hora después, policías llamaron a parientes del empresario, a quienes les indicaron que habían encontrado muerto a un hombre en una trocha en Turbaco, que lleva a Turbana, y que este tenía los documentos personales de José. Por ello, creían que la víctima era este.
Los parientes no creían lo que escuchaban, pero se terminaron de convencer cuando al revisar redes sociales vieron una publicación que indicaba que en el sector Aguas Prietas de Turbaco habían hallado una camioneta abandonada: era el vehículo de José Carlos. La Policía confirmó el hallazgo del vehículo, que fue inspeccionado.
Al empresario lo hallaron en la trocha con un balazo en la cabeza. Sus parientes indicaron que no tenía su cartera y tampoco su bolso. Las indagaciones preliminares indican que a la víctima la balearon en un posible atraco. Los parientes de Osorio hacen averiguaciones para determinar sin antes del crimen hizo algún retiro de dinero en una entidad bancaria.
De otro lado, está la muerte de Gustavo Antonio Padilla Marimón, quien tenía 20 años. Este vivía en el barrio Policarpa y su muerte es un misterio hasta ahora. Unos dicen que se trató de una riña, mientras que otros creen que fue un ataque directo.
El asesinato ocurrió a las 7:20 de la noche del jueves. A esa hora, la madre de Gustavo estaba en su casa cuando vecinos llegaron corriendo a buscarla, indicándole que a este lo acababan de balear y que estaba muerto.
La mujer empezó a llorar y acompañada por otros familiares fue al lugar indicado. Su retoño estaba junto a una vía destapada, en el barrio Villa Hermosa, que está junto a Policarpa.
Entre varias personas cargaron al herido y lo llevaron al CAP de Arroz Barato, pero allí llegó muerto. El lugar estaba solitario cuando ocurrió el hecho y aún no hay testigos, por lo que se desconoce qué pasó a ciencia cierta.
Por último, está el caso de ‘el Cachaco’, un habitante de calle que ayer, cerca de las 7 de la mañana, fue hallado muerto frente al sector Las Estibas de El Bosque, junto al costado izquierdo del puente que lleva a Manga.
Tenía un golpe contundente en la cabeza. Se comenta que el agresor sería otro habitante de calle con el que tuvo una pelea, quien luego lo habría sorprendido mientras dormía a la intemperie, golpeándolo en la cabeza. El cuerpo de la víctima está como NN en la morgue de Medicina Legal.
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