Karma, justicia o simplemente la consecuencia de sus actos. En menos de dos días, tres presuntos atracadores han sido abatidos por miembros de la Policía, en Arjona y Cartagena (2). En medio de estos procedimientos, atraparon a dos de los presuntos cómplices, uno de los cuales resultó herido.
Los eventos comenzaron el martes, a las 4 de la tarde, junto a la entrada de Nuevo Campestre, frente a Ceballos. Nover Eliécer Luna Ortiz iba de parrillero y en ese punto fue interceptado por dos miembros de la Sijín que notaron cuando, presuntamente, atracaban a dos trabajadores de una empresa.
La Policía Metropolitana señaló que los investigadores confrontaron a los dos sujetos y entonces hubo un cruce de balas. Nover, de 21 años, recibió varios balazos y murió en el acto. Junto a su cuerpo hallaron el arma de fuego con la que le habría disparo a los miembros de la Sijín.
El hombre que manejaba la moto en la que iba Luna Ortiz fue capturado, resultando ileso. Se trata de Rafael Luis Contreras Imitola, de 34 años y a quien apodan ‘el Coco’. El miércoles fue llevado ante un juez de Garantías, tras un proceso por hurto agravado y porte ilegal de armas. La Policía confirmó que Nover tenía anotaciones por los delitos de por porte ilegal de armas de fuego, hurto agravado y extorsión agravada.
“El modus operandi de ‘el Coco’ y ‘Nover’ era abordar a trabajadores de la zona industrial y conductores de vehículos de carga en principales arterias como la vía a Mamonal, avenidas El Bosque, Crisanto Luque, El Consulado, afectando a residentes de los barrios El Campestre, Corales, El Country, La Troncal, Nuevo Bosque, San Isidro, Zaragocilla, La Castellana, Alto Bosque, Bruselas y Chile. Durante el operativo fue incautado un revólver, calibre 38 con cacha ortopédica, y se inmoviliza una moto Bóxer negra, de placas DAH-53A, empleada por los presuntos delincuentes y adaptada para obtener un mejor rendimiento y alcanzar una mayor velocidad en pocos segundos”, señaló la Policía.
¡Tremenda sorpresa!
Las horas pasaron y el miércoles, poco antes de las 7 de la noche, otro caso ocurrió en el sector Omaira Sánchez del barrio La Candelaria. A esa hora, indicó la Policía Metropolitana, dos miembros de la Sijín caminaban por la zona. Iban de civil y estaban en medio de labores investigativas.
Pero mientras buscaban detalles del caso que indagaban, dos sujetos los interceptaron. Dos sujetos armados que desconocían que se trataba de dos policías que iban armados. Su falta de astucia la pagaron cara. Increparon a los dos funcionarios para despojarlos de sus pertenencias. La Policía aseguró que Francisco Javier Camargo Arias, de apenas 20 años, era uno de los atracadores.
Fue este quien llevó la peor parte, pues los investigadores de la Sijín reaccionaron ágilmente, sacaron sus armas y dispararon. Francisco recibió varios impactos y su acompañante también resultó herido. Los policías pidieron refuerzos y los dos heridos fueron llevados al CAP de La Candelaria, donde Camargo murió. Su compañero fue internado en una clínica. La Policía confirmó que el joven de 20 años abatido tenía anotaciones penales por los delitos de violencia contra servidor público y hurto calificado.
Solo un par de horas después, el miércoles a las 9 de la noche, ocurrió el otro caso, en Arjona. Las indagaciones dejan ver que un hombre llegaba a su casa en el barrio Las Parcelas, junto a su esposa. Pero estos fueron interceptados por dos sujetos en una moto, que con arma de fuego en mano les hurtaron un celular y $400 mil en efectivo.
Miembros de la Policía de Bolívar fueron alertados y empezaron labores de búsqueda y cierre de vías. Los uniformados tenían las características de los atracadores y de la moto en la que iban y fue así como lograron interceptarlos.
Se conoció que en la persecución, los sujetos cayeron de la moto. Uno de los presuntos atracadores era Félix Alberto Cortecero Quintana, de 37 años, quien iba de parrillero en el vehículo de dos ruedas.
La Policía de Bolívar señaló que el hombre intentó dispararle a los uniformados, pero estos reaccionaron para proteger su integridad física y le dieron un balazo en el abdomen.
El baleado fue llevado por los policías al hospital del pueblo, pero allí murió instantes después. “El otro presunto delincuente que acompañaba a Félix Cortecero logró escapar dejando la moto abandonada a pocos metros del lugar de los hechos. Los uniformados pudieron determinar que la moto fue denunciada como hurtada hace un par de días, por lo que automáticamente se produjo su recuperación. De la misma manera, los uniformados se incautaron de un arma de fuego artesanal calibre 32, que portaba el presunto antisocial.
Según las investigaciones adelantadas por unidades de la Sijín, esta persona también registraba antecedentes penales en la base de datos de la Policía Nacional por el delito de contrabando.
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