A sus 23 años, Leonar Manuel Sosa Rincón tenía clara su meta. Trabajar duro y perfeccionar el arte de la soldadura, pues dentro de unos meses tenía pensado irse a Panamá, por una promesa de trabajo, a labrarse un mejor futuro.
Por eso estaba haciendo cursos y preparando todos los documentos necesarios. Por desgracia, un balazo bastó para truncar todos sus sueños y trazar su triste suerte. Ayer, a la 1:30 de la madrugada, fue baleado por un pandillero en la urbanización Sor Teresa de Calcuta, que está junto al barrio El Educador. Un amigo suyo, Harold Miranda De Ávila resultó herido en el mismo hecho y está grave. Leonar vivía en la carrera 76B de El Educador y era el menor de 4 hermanos.
Sus parientes dijeron que trabajaba con unos ingenieros que tienen una empresa contratista. El sábado laboró y antes del anochecer llegó a su hogar. “Estuvo aquí, se cambió y le dijo a la mamá, ‘Gisella ahora vengo, no me demoro’, y después se fue para donde unos primos en la urbanización Sor Teresa de Calcuta, que está cerca”, dijo un pariente del joven. Leonar llegó a la urbanización y se sentó a departir en la terraza de la casa de un primo. Lo acompañaban varios amigos.
“Era la una y media de la madrugada -de ayer- cuando el primo vio que venían varios pandilleros y le gritó a Leonar y a todos los que estaban allí que entraran rápido a la casa. Los pandilleros iban a atracarlos y al ver que entraban a la casa (Leonar y sus amigos) uno de ellos sacó un arma y le dio un balazo en el pecho al amigo de Leonar - Harold-, que estaba detrás. Cuando cayó, Leonar quedó descubierto y le dieron un balazo en el tórax”, relató la madre de Sosa. Los pandilleros huyeron y a Leonar lo llevaron a la Clínica San Juan de Dios, donde llegó muerto. A Harold lo llevaron a la Clínica Blas de Lezo. Allí lucha por su vida. Instantes después, la Policía capturó al presunto asesino, apodado ‘el Arenca’, de 30 años. Dicen que es líder de 4 pandillas y ayer sería llevado ante un Juez de Garantías
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