Tan agitada como su vida fue su muerte. Más de cien personas se agolparon ayer, a las 9:45 de la mañana en las afueras de la tienda Los Villalobos, que está a un lado de la Avenida Pedro Romero y junto al colegio Playas de Acapulco, en el barrio Líbano. Querían conocer la tragedia de Jesús María Villalobos Luna, popularmente conocido como ‘el Perro’.
“Mataron al Perro”, “mataron al Perro”, se escuchaba entre la muchedumbre. Vendedores de chance, mujeres descalzas y en pijamas, mototaxistas, vendedores ambulantes y un sinnúmero de curiosos buscaban hacerse un lugar en la entrada de la tienda, mientras uniformados de la Policía Metropolitana trataban de contenerlos, en medio del inclemente calor.
Dentro estaba el cadáver del ‘Perro’, polémico empresario del chance, quien también fue concejal, empresario de picós y de artistas locales. Odiado por unos, amado por otros.
El hombre, de 76 años, acababa de ser asesinado a balazos. Quedó muerto en la silla donde diariamente se sentaba a revisar las cuentas de su negocio, con la cabeza y un brazo sobre la caja registradora. Usaba sus gafas de aumento, pero no tenía el usual sombrero con el que solía vérsele. En el mismo hecho resultó herido de gravedad su sobrino y escolta Marcos Piedrahíta Caraballo, de 38 años, al enfrentarse a los sicarios. Está grave en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario del Caribe (HUC). Tiene un balazo en el tórax y otro en un brazo.
Aunque los parientes de Jesús María dijeron no tenía amenazas ni líos, hace unos seis meses, dijo en medio de sus intervenciones matutinas en la emisora La Cariñosa, en las que daba los resultados del chance, que pronto “no estaría en este mundo”, porque estaba amenazado por la banda ‘los Urabeños’. Indicó que no había cedido ante las extorsiones que le estaban haciendo. Ayer, su presentimiento se convirtió en una triste realidad. Vaticinó su muerte.
Así fue el crimen
Jesús era oriundo de Plan Parejo, jurisdicción de San Onofre, Sucre. Se vino a temprana edad a Cartagena y tuvo 9 hijos. Tenía más de 50 años administrando juegos de azar y era compadre de Enilce López, la ‘Gata’, propietaria de Unicat. Ella es la madrina de una de sus hijas. El ‘Perro’ no sabía leer ni escribir.
Vivía en Manga y tenía su tienda en Líbano, donde además tenía otra vivienda. Dicen que ayer llegó a la tienda temprano y de inmediato se fue a la caja. Testigos explicaron que una mujer entró al lugar con dos bolsas de regalo para despistar. Adentro, sacó un arma de una de las bolsas y, al tener de frente a ‘el Perro’, le dio un balazo en la cabeza y otros tres en el pecho, que fueron fulminantes. Cuando el escolta quiso reaccionar, también fue baleado. La mujer salió del sitio con dos sujetos que la acompañaban y huyeron en dos motos. Pese a los operativos de la Policía, escaparon. Una versión dada por la Policía indica que la mujer llevaba las bolsas de regalo, pero se las habría entregado a uno de los sujetos que la acompañaba, que habría sido quien disparó.
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