Un milagro divino. A eso atribuyen muchos habitantes del municipio de Corozal (Sucre), el que el sacerdote Armando Chávez, vicario parroquial de la iglesia Santa Cruz del barrio Manga, haya salido ileso en un accidente que ocurrió el domingo pasado.
Se conoció que el cura estaba en Sincé y que regresaba a la Heroica en compañía del sinceano Alfonso Guzmán, a bordo de una camioneta.
Eran las 8 de la mañana y todo iba bien hasta que al cruzar por Corozal las condiciones climáticas les jugaron una mala pasada. Un torrencial aguacero caía y para salir a la carretera Troncal de Occidente, vía a Cartagena, debían cruzar un canal, conocido como el Arroyito, que está en el barrio San Juan. Debido al aguacero, la corriente del canal era fuerte y cuando la camioneta intentó cruzar, fue arrastrada por el agua. “Un puente que está cerca al almacén Agrometal la detuvo, sino quien sabe dónde estuviera el cura. Allí la gente los ayudó y fueron rescatados sanos y salvos”, dijo un testigo.
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