Sucesos


"Yo soy la víctima": Holandés investigado por crimen de su esposa

WILSON MORALES GUTIÉRREZ

25 de septiembre de 2015 12:00 AM

Lejos de su hogar. En una tierra desconocida e investigado por el homicidio de su esposa Durdana Bruijn, quien fue asfixiada dentro de un velero en el sector Bahía de Las Mantas, en Isla Grande (Islas del Roasario).

Esa es la situación que enfrenta hoy el holandés y veterinario de profesión Peter Putker, quien habló en exclusiva con El Universal, reafirmando su versión de que su esposa y él fueron víctimas de atracadores que les robaron varias pertenencias, y que además acabaron con el idilio que vivían de una forma nefasta: con la muerte.

El extranjero llegó ayer a las instalaciones de este medio con el mayor de sus tres hijos, Roderick Micha Putker, su hermana Miriam Putker y junto a otros dos parientes. También los acompañó su abogado defensor, el penalista Hernando Osorio Rico. Ante todos ellos, explicó cómo fue su vida con Durdana y contó qué fue lo que pasó dentro de su velero, el Lazy Duck, aquella oscura noche del sábado 19 de septiembre. (Lea: Ya están en Cartagena familiares de holandesa asesinada en velero)

SIN PROBLEMAS NI PELEAS

El holandés, con ayuda de una traductora, relató en su idioma natal que vivía con Durdana en Utrecht, una población que está en el centro de Holanda. A ella la conoció hace más de 33 años y al poco tiempo tuvieron a su primer hijo. Luego tuvieron otros dos retoños, que tienen 26 (estudiante), y 30 años (científico y programador de computadores).

“Peter asegura que nunca tuvieron problemas relacionados con una infidelidad u otra cosa”, señaló el abogado Hernando Osorio. Putker contó que por el tiempo que tenía ahora para disfrutar con su esposa, decidió emprender una travesía junto a esta en su velero. Hace tres años y medio salieron en la nave de Holanda, haciendo escalas en distintos países. Hace casi siete semanas llegaron a Colombia, procedentes de Curazao, y estuvieron en distintas partes del interior, dejando su velero en distintos puertos. El 15 de septiembre arribaron a Cartagena, donde planeaban estar hasta el domingo pasado. Después de Cartagena irían a Panamá y luego regresarían a ver a su familia en Holanda. En el futuro planeaban ir a Cuba.

Pero todos esos sueños acabaron el sábado pasado. Peter dijo que ese día, a la 1:30 p.m., llegaron a Isla Grande y fondearon el Lazy Duck a unos 100 metros de la orilla. “Careteamos, jugamos juegos de mesa y hablamos. Vimos a otro velero y dos barcos de motor, pero al finalizar la tarde todos se fueron. Compramos una langosta a unos pescadores que pasaban, que Durdana iba a preparar porque íbamos a hacer una cena romántica”, relató el extranjero.

En cuanto a que esa tarde una testigo indicó a la Policía que habría visto discutir a los holandeses en el velero, el abogado de Peter indicó que eso es falso. “Quién va a escuchar una discusión estando el velero a 100 metros de la orilla, es imposible, eso es falso. Durdana era una mujer alegre, de pronto la vio a lo lejos alzar los brazos y por eso dice eso. No dudamos que pueden aparecer testigos que quieran cobrar esa recompensa de los $ 30 millones que ofrece la Policía”, puntualizó Osorio Rico. (Lea: Autoridades buscan esclarecer muerte de holandesa en las Islas del Rosario)

AMORDAZADO

Peter explicó que cuando eran las 7 de la noche del mismo sábado, fue a la parte interna del velero e ingresó al baño, mientras su mujer se quedó afuera. Dijo que entonces dos sujetos entraron a donde estaba y lo doblegaron. Putker explicó que en ese momento escuchó gritos de su esposa, y creyó que afuera había unos dos delincuentes más. “Le pusieron una barra metálica en la cabeza, con la que le hicieron presión contra una pared y así le causaron la herida que tiene en la cabeza.

El señor Putker dice que lo amarraron por las muñecas y que cuando salió encontró a su esposa amarrada y con una toalla ensangrentada, con la que le envolvieron la cabeza.

Los atracadores se llevaron dinero, un bolso y dos cámaras fotográficas”, explicó el abogado del holandés. En cuento a las dudas que ha generado el que el capitán del velero no haya sentido que los “piratas” subieran a la nave, el jurista indicó que el velero pesa 16 toneladas y que además tiene una escalera por la que fácilmente pudieron subir los desconocidos. “Una persona pesa en promedio unos 70 kilos. Este peso, ante las 16 toneladas de la nave, no se iba a sentir. Además, el barco se mueve por las olas”, dijo. 

Putker señaló que los sujetos arrancaron el cable de su radio y que con este amarraron a su mujer. Dijo que por eso no pudo llamar a través de este a las autoridades, y que le tocó hacerlo por su celular. “Llamó a la línea de emergencia 112 de su país. Coincidencialmente la línea de emergencias de aquí es la misma y le contestaron fue aquí”, explicó el abogado de Peter. Este último contó que ante el hecho, el extranjero sonó pitos, lanzó bengalas y prendió las luces de emergencia, como lo había explicado un testigo a este medio.

Peter indicó que intentó reanimar a su mujer dándole respiración boca a boca, pero que todo fue inútil porque ya estaba muerta.
Lugareños llegaron a prestarle ayuda y luego Guardacostas de la Armada arribaron al sitio y corroboraron el suceso. Las autoridades han sostenido desde un principio que hay inconsistencias en la versión de Peter. Sin embargo, su abogado y sus parientes creen que esto ocurrió porque no tenía un traductor. “Hablaron con él en inglés y no en su idioma natal. Eso pudo generar algunas confusiones”, indica su abogado defensor. (Lea: "Lo del robo es algo inusual": Armada sobre caso holandesa asesinada)

NO SE IRÁ

Osorio también explicó que el cadáver de Durdana permanecerá en Medicina Legal hasta que los peritos del instituto realicen todas las pruebas científicas necesarias para esclarecer el caso. Después de ello, se encargarán de llevar el cadáver de la mujer a Holanda, para darle el último adiós. “El señor Peter no tiene ninguna medida hasta ahora. Está libre y no tiene restricciones para salir del país. Pese a ello, él se va a quedar aquí hasta que todo esto se aclare. Él, libremente, va a dar sus declaraciones a la Fiscalía, por escrito. Dicen que tiene rasguños, pero eso no es así. Las marcas que tiene en las muñecas son porque lo amarraron”, dijo Hernando Osorio. (Lea: Esposo de holandesa asesinada en velero, sin restricción para salir del país)

Peter aseveró que luego que se aclare la situación, en un futuro, sí volvería a Colombia. “El día del hecho estaba hablando con mi esposa de que estábamos disfrutando nuestro viaje y que era una lástima que a Colombia no vengan tantos turistas. En este momento no sé qué pensar, pero estoy seguro que hay más colombianos buenos, que malos. Volvería a Colombia. Mi barco está aquí. Soy inocente, yo soy la víctima”, sentenció Putker. El hijo y la hermana del veterinario entablaron una denuncia contra los sujetos que participaron en el que ellos aseguran fue un robo que terminó con el crimen de Durdana Bruijn.

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