La consagrada diseñadora de modas bogotana, que traerá a Ixel Moda prendas llenas de frescura en verde menta, azul cielo, amarillo y rosado, cree que lo más tóxico para un diseñador es asumir que es el mejor.
Bettina Spitz es dulce y delicada como su última colección, Algodón de Azúcar. Llegó al lanzamiento de Ixel Moda en el salón de la Cámara de Comercio, sede Corferias en Bogotá, luciendo un estupendo suéter de lana azul pastel con apliques en piedras brillantes que hizo que muchos voltearan a mirarla. Le dio un sutil calor al frío del salón, inundado de negro y gris. Su estilo, elegante pero fresco y liviano, la han consagrado en el mundo de la moda en Colombia, como una diseñadora de gusto exquisito, que se fija en la necesidad de comodidad y versatilidad de la mujer.
Nació en Bogotá luego de que sus padres abandonaran su natal Alemania, años después de la Guerra. Su madre, Íngrid Kreie fue modelo y diseñadora (ahora pintora) así que el contacto de Bettina con las telas, hijos y agujas se dio desde su nacimiento. Creció viendo cómo su madre transformaba la ropa y se rodeaba de belleza y glamour.
En sus últimas muestras, no han podido faltar el rosado, azul, dorado, verde menta, crema, así como los pantalones, sacos y shorts. Uno de los eventos más esperados en Cartagena. Ixel Moda, que tendrá lugar desde el 16 hasta el 18 de marzo, mostrará las creaciones de Bettina Spitz, una mujer risueña, de voz apacible, sencilla y de labor exigente.
Un poco sobre Bettina
“Nací en Bogotá. Mis padres son alemanes y toda la vida he estado acá. Solamente fui a estudiar moda a Alemania. Mi gusto por lo que hago nació por mi mamá, quien era diseñadora. Después de la Guerra llegó a Colombia. En Alemania fue modelo y trabajó en una empresa de moda. Cuando llegó a Colombia se vinculó a Valdiri, una empresa casi que pionera en moda en Colombia y allí empezó a hacer unos desfiles, pasando del departamento de diseño a manejar todo .. . y yo detrás de ella desde chiquitica. Iba a las ferias, a las tiendas, a los viajes ... esa fue mi infancia y siempre tuve claro que ese iba a ser mi futuro”.
¿Sientes que una de tus influencias en moda es tu madre?
-Sí, yo creo que todo lo que uno vive y todas las experiencias lo van marcando a uno todo, todo y eso con el tiempo va saliendo. Es decir es muy importante hacerle caso a todo lo que le pasa a uno en la vida para crear una identidad, entonces claro, ella está presente siempre. Estuvo de hecho en la última pasarela que hice. Fue inspirada en ella, porque cumplió ochenta años entonces hicimos una gran fiesta y la colección se llamó como ella: La Bella Íngrid. Había Estampados de ella en sus años dorados, de hecho yo tenía una blusa con ese estampado puesta y sí, ella siempre ha estado muy presente. Hoy en día pues somos muy amigas, ella ahora es pintora y muy atrevida con el color y con todo para la edad que tiene que ya son 80. Ella sigue siendo una persona muy juvenil. Está al lado mío siempre.
¿Pensaste alguna vez estar un paso delante de los diseñadores colombianos, teniendo en cuenta tu marcada tendencia Europea y todo lo que en Colombia se tomaba de ella?
-No, no, porque cada uno de los diseñadores tiene sus propias vivencias. Entonces no para nada y creo que no es bueno jamás sentirse que uno está por encima de nadie. Esos complejos de superioridad no lo dejan a uno ni corregir, ni avanzar ni nada de nada.
¿Cómo te inspiras?
-Todo se impregna en uno, cómo uno es, los viajes, la familia, todo lo que a uno le gusta, finalmente todo eso es lo que plasmamos.
Mientras hablamos, varios amigos se acercan a saludarla y a elogiar su ropa. Ella les agradece y continúa la entrevista justo por donde la dejamos. “… Como un pintor y todo eso va en la obra”.
¿Qué mostrarás en Ixel Moda?
-Esta colección se llama Algodón de Azúcar y es exactamente eso, es como un dulce en cuanto a los colores y a las texturas. La mezcla es súper femenina y juvenil. Son unas niñas jugando a vestirse lindo, son como unas princesas. Es la continuación de nuestro verano que mostramos de La Bella Íngrid, con unos colores que de verdad como que uno se los quiere comer. La mezcla de los materiales es como una mezcla ecléctica, trabajada con mucho balance. Siempre con nuestros trabajos a mano, nuestras manualidades, nuestros bordados, nuestros estucados y accesorios a mano, dándoles como el toque final a la ropa”.
¿Existe una paleta de colores que sea imprescindible?
-Los colores para mí son básicos en la colección y quisiera que siempre cambiaran, siempre, siempre. Obviamente el blanco y negro es el blanco y negro, pero a veces no se usa, no necesariamente. Yo creo que sí deberían cambiar y es bueno que cambien los colores, de hecho estaban tratando que el azul oscuro reemplazara el negro para que no siempre fuera el mismo. Aunque fíjate, hay cosas que cambian. Siempre el dorado es distinto, cambian los tonos y eso es lo que precisamente le da el cambio a la moda… bueno el vintage, que uno vuelve y retoma el abrigo de la abuela, pero por más que se retomen temporadas pasadas, nunca son iguales, siempre hay un cambio tecnológico en el color. Entonces eso es lo chévere de la moda: ese cambio.
“1, 2, 3 … buenas tardes a todos”, dijo la conductora del lanzamiento de Ixel Moda a través del micrófono. Me despedí de Bettina con un abrazo, una sonrisa y como muchos, muriéndome de ganas por ver sus diseños en Cartagena.
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