¿Dónde encontrar una exposición artística con murales y dibujos al estilo galería urbana a cielo abierto? En Cartagena, y no precisamente en el Centro Histórico, están en pleno Luis Carlos Galán, uno de los barrios más deprimidos del sur de la ciudad.
Los dibujos o grafitis no son simples firmas o mensajes vandálicos, como muchos pensarían. Son auténticas obras de arte que le dan color y vida a las paredes, y hacen que los vecinos se detengan a admirarlos y se llenen de emoción al ver la galería que decora su barrio en la primera y segunda etapa.
Esta iniciativa nació, según explica el comunicador social Ronald Carrillo Magallanez, cuando un viejo amigo australiano, Jerome -artista experto en grafitis y murales- y su novia Olivia, le contaron que venían a pasar vacaciones a Cartagena y aprovechó para proponerle trabajar juntos en una jornada artística.
Sin pensarlo dos veces, Jerome aceptó y juntos empezaron a cuadrar la que sería la ‘Galería Urbana 2017’, que hace parte del proyecto ‘Encuentros’, iniciativa que tiene como objetivo descentralizar la mirada de la ciudad y acercar a la gente a las manifestaciones culturales. En ocho palabras: apreciar la cultura desde lo barrial y cotidiano.
A través de una convocatoria en Facebook, Ronald, líder de ‘Encuentros’, logró reunir a 18 artistas urbanos de la ciudad interesados en hacer parte de la actividad y desde ahí arrancó la jornada.
A las 10 de la mañana del 11 de marzo, Jerome hizo su primera parada en la Biblioteca Jorge Artel, donde conversó con los artistas locales, les presentó su trabajo, narró cómo logró vivir de las artes plásticas y su experiencia.
Al día siguiente, Bluny, Cpg, Katherin, Serok 7, Tizxo, Jerome, Colectivo Perrenque, Jeffry Zapateiro, Sode, Black, Sired y Dark, con sprays, brochas, vinilos y pinceles se trasladaron al Luis Carlos Galán para arrancar con “Grafitis pa’ ti, grafitis pa’l barrio”.
Pintar las paredes no es tan fácil como parece. Los grafiteros aseguran que en Cartagena es muy difícil encontrar los colores que se necesitan para que el dibujo quede perfecto. “En la ciudad no hay un mercado que se encargue de promocionar o vender productos especiales para grafitis, por tal razón se mandan a pedir a Bogotá y Barranquilla, y eso siempre dura un par de días”, afirma Tizxo, artista urbano que propuso a Luis Carlos Galán como el barrio para realizar la actividad.
Álvaro Lentino Leones, presidente de la Junta de Acción Comunal (Jac) del barrio y padre de Tizxo, tocó las puertas de los vecinos desde temprano para explicarles lo que se haría y pedir los respectivos permisos. Algunos se opusieron a prestar la pared para realizar los dibujos y ese día cayó un fuerte aguacero y había mucha brisa, pero nada de esto fue impedimento para elaborar los murales.
Sobre una pared en blanco, Tizxo estaba listo para plasmar. “Aquí usé rodillos para los trazos y con el spray mejoré el boceto. Luego comencé a hacer el relleno, más que todo figuras geométricas, para darle la textura de vidrio o de cristal”, dice, mientras explica con orgullo cómo ha efectuado su obra, llamada ‘La fragilidad de un fuerte’.
“Le puse este nombre para resaltar la fortaleza y debilidad de cualquier persona o ser vivo, porque si bien sabemos que el oso es un animal de mucha fuerza, también es cariñoso y tierno, lo cual representa la felicidad y la tristeza”, explica el artista.
Transcurría el día y la actividad fue, literalmente, un emotivo encuentro. Jóvenes, adultos, niños, sacaron sus sillas y paraguas para ir a admirar los dibujos y encontrarse de cerca con los creadores. Con champeta de fondo y un par de cervezas, estos artistas urbanos lograron plasmar su arte y sacaron adelante sus obras a cielo abierto que se ganaron la admiración de todos.
“Fue un día épico. Me gustó mucho compartir mis conocimientos e inspirar a los demás artistas que también aman esto. La mejor parte que experimenté fue sentir el ambiente de un barrio popular con los niños corriendo, música sonando, jóvenes y personas adultas disfrutando de la música en las terrazas mientras intercambiábamos historias. El apoyo de la comunidad es fundamental porque sin ella no se hubiera podido realizar. Sentimos pura felicidad”, comentó Jerome con una gran sonrisa.
El resultado de una intensa y exitosa jornada fue una ballena gigante, un ojo de varios colores, un hombre alegre, una mujer rodeada de flores, un oso polar de cristal y un niño con figuras geométricas alrededor, que le dan vida a la calle y, a la vez ofrecen a los transeúntes y vecinos una experiencia visual acogedora y atractiva.
“Más que unas simples pinturas, representan la diversidad que existe en el barrio. Cada pintura motiva al espectador a mejorar la comunidad. Todas me gustan por el mensaje que transmiten y además hacen del barrio otro ambiente en el cual vale la pena estar”, comenta Yerlidis Colón, residente de Luis Carlos Galán.
“Este es el primer paso del proyecto. Nuestra meta es tomarnos los municipios, ciudades, para llevar nuestro arte a todos los rincones y cambiar la perspectiva de lo que somos. No es rayar las paredes porque sí, sino llevar un buen mensaje”, anota Tizxo con gran satisfacción.
En nombre de todos los artistas urbanos, pide a todos los cartageneros que aprecien el arte y cambien el concepto que se tiene de los artistas urbanos, de que son bandidos y desocupados.
“Mi papá ahora me ve con otros ojos y ya se dio cuenta de que este es mi estilo de vida. Entendió que puedo ser responsable y hacer cosas buenas por mi comunidad, sin dañar a nadie”, concluye.
Epílogo
Tizxo se llama en realidad Santiago Lentino Leones, tiene 20 años y, desde que pisó sexto de bachillerato, descubrió en el arte urbano una pasión profunda y colorida. Un amigo del salón le mostró cómo pintar en las paredes, y él comenzó a inundar con color los patios y los cuartos de otros amigos.
El tiempo pasó y él estudió Instrumentación Industrial en Bellas Artes, pero nunca se olvidó del color. Es más, descubrió que si se mira bien, una pared en blanco puede ser una mensajera.
“No es pintar por pintar -dice-. Es dejar un mensaje”. Y eso es ‘Encuentros’, encontrar una forma colorida de dar un mensaje de paz.
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