Un plato vacío de comida, un estómago repleto de hambre. Un indigente dormido...su “cálida” y dura cama: un puente peatonal diseñado para caminar, no para dormir. Las almohadas, dos zapatos viejos que alguna vez fueron blancos...y su pijama… una camiseta tan blanca como la paz, estampada con una promesa bella y ambiciosa: “Soluciones serias”...¡So-lu-ci-o-nes! ¿Podría ser más cruel esta realidad?
¿Cómo se llama? ¿Acaso Juan, Pablo o José? ¿A alguien le importa su nombre? ¿Qué sueña el negro durmiente? O, más bien, ¿sueña?
Esta “postal” puede no ser tan bella como el imponente Castillo de San Felipe de Barajas, pero vaya que representa a Cartagena, dice su creador: nuestro reportero gráfico Julio Castaño Beltrán.
El lente de Julio ha inmortalizado hace veintidós años la sonrisa de la Señorita Colombia, el asesinato de algún pandillero de barriada, el orgullo del presidente Santos y de “Timochenko” al firmar el acuerdo final de paz entre Gobierno y Farc...y Julio vio al indigente, por eso empieza este recorrido de cinco miradas a una sola imagen, a una sola realidad.
Julio Castaño, reportero gráfico. Nombre de la foto: “Indiferencia”.
Simplemente tropecé con esta imagen. Y siento que esa es la tarea del reportero gráfico, capturar realidades que para muchos pasan inadvertidas día a día, tener buen ojo para ver lo que para otros es invisible. Esa mañana, solo pasé, vi la escena, bajé y tomé la foto desde todos los ángulos posibles...todos los planos, y ésta es la que más me gustó. ¿Por qué me gustó? Es que muestra tanto: el tipo que camina a su trabajo es indiferente, como su familia y el mismo Estado, que ha abandonado a esta persona y él, a su vez, es un invasor del espacio público. Hay negligencia, corrupción, politiquería. Hay hambre y hay indefensión, porque ese ser humano no tiene ni techo ni cama. Esta es la viva imagen de la realidad cartagenera y de la colombiana.
¿Has escuchado del fotógrafo Kevin Carter? Ganó el Pulitzer en 1994 por una foto famosa: un buitre que esperaba paciente al lado de un niño sudanés, que estaba a punto de morir de hambre, para devorarlo. Luego de las felicitaciones, vinieron las críticas a Carter. ¿Qué hizo por el niño? ¿Por qué no lo alimentó? Él se suicidó...muchas veces la gente no entiende la carga emocional que debemos soportar los que retratamos la realidad. La foto del indigente me tocó, pero ¿qué puedo hacer para cambiar su situación? Por ahora, solo retratarla y presionar al Estado, que solo con denuncias públicas parece pellizcarse, que lo hace de momento al sentir que la imagen publicada le toca sus sentimientos, actúa de una, pero esa eficiencia solo se refleja en las 72 horas siguientes: censos, le llevan comida, los recogen, le ofrecen techo mientras pasa el impacto negativo de la fotografía. A los ocho días todo vuelve a la “normalidad” para ese habitante de calle, otra vez al puente, y claro, como ya no podemos tomar la misma imagen ni publicarla. El problema sigue...pero ¿quién lo resuelve para siempre?
De Julio pasamos a Johnatan Suárez, más cartagenero que las Botas Viejas y pintor de calle. Hace años, se dedica a pintar realidades callejeras: “mujeres galantes, vendedores ambulantes, tú y yo...la calle no es solo de los indigentes” -aclara-. Hace tiempo retrata la vida de los indigentes que deambulan por la Ciudad Heroica.
Johnatan Suárez, pintor. Nombre de la foto: “La perspectiva del reposo”.
“La imagen muestra una realidad conmovedora. Es un drama contemporáneo común. Como artista siempre persigo la composición, y dentro de esta foto hallo en primer plano a una persona que deja atrás una escena que poco le interesa. Deja atrás al indigente, un individuo ausente...tal vez dormido, tal vez ido...y nosotros mismos le armamos ese universo al habitante de calle, pues su realidad existe en el contexto de quien lo ve, de quien lo considera. Diría, para finalizar, que el protagonista de esta foto es el espectador, más que el espectáculo”.
Del pintor, pasamos a una mirada más espiritual, religiosa y literaria: el padre Ubaldo Díaz, que oficia en Magangué y es Premio de Cuento y Poesía de Floridablanca, Santander (2003).
Ubaldo Díaz, sacerdote. Nombre de la foto: “El mundo indolente da la espalda al que sufre”.
“Esta foto es la paradoja entre la promesas de los políticos y la realidad de la miseria. Provoca indignación la falta de solidaridad del mundo, que ha dado la espalda a un cristiano. Y frente a esta situación la Iglesia tiene la responsabilidad de hacer que estos seres, adoloridos y abandonos, se sientan acogidos y protegidos porque son seres humanos. Desde la Iglesia, podemos hacerlos visibles para que se conviertan en sujetos de estado”.
La “pijama” del indigente y su mensaje esperanzador parecen una señal divina para la siguiente mirada: un politólogo, Pablo Abitbol, además filósofo y candidato a doctor en economía. Docente de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Tecnológica de Bolívar.
Pablo Abitbol, politólogo. Nombre de la foto: “Corrupción versus esperanza”.
“Es una foto emblemática de Cartagena, una ciudad que tiene a la cuarta parte de sus habitantes sumidos en la pobreza, con uno de los índices de pobreza más altos entre las principales ciudades colombianas (26%). Los habitantes de Cartagena que enfrentan la tragedia de la pobreza extrema -seguramente entre quienes está la persona de la foto- son el doble (4%) de quienes la enfrentan en otras importantes ciudades de Colombia.
"Entre las diez ciudades colombianas en las que se mide el Índice de Progreso Social, Cartagena es la segunda con peores resultados. Interesante, la camiseta que viste la persona de la foto representa uno de los principales factores que causan la tragedia de la pobreza: la forma como se hace política en nuestra ciudad. Las prácticas clientelistas y corruptas de los políticos, las élites y buena parte de la ciudadanía cartagenera se configuran como una verdadera trampa de la pobreza, que hace mucho más difícil que la gente pueda salir de ella. También hay un plato de comida; no sabemos si pertenece a la persona de la foto o si alguien se lo dejó ahí. Para mí, esto representa la esperanza de una gente, de una comunidad, que podría tomar esta tragedia de la pobreza en sus manos, pero que no logra activar su profunda, pero ausente, solidaridad”.
Y si hay alguien que sabe de indicadores de pobreza, desempleo, política...mejor dicho, de ciudad, es Cartagena Cómo Vamos. El equipo de ese programa, que hace diez años mide la calidad de vida de los heroicos, también pone nombre y adjetivos a la foto de Julio.
María Claudia Peñas, politóloga y directora de Cartagena Cómo Vamos. Nombre de la foto: “Contrastes”.
“Trabajo contra desempleo, salud contra desnutrición y enfermedad, pobreza contra oportunidades. El hombre que avanza por el paso peatonal, aparentemente dirigiéndose a su lugar de trabajo, deja atrás a un habitante de calle que personifica el extremo de las fallas del gobierno local para mejorar la calidad de vida de la ciudad. La bolsa plástica en el piso y el habitante de calle hacen un símil: lo que está tirado en el piso es desechable, no sirve, es como si ya no prestara ningún servicio. Lo que nos llevaría a pensar en una ‘política desechable’. Más de mil seiscientos millones de pesos reportaron las campañas a la Alcaldía Mayor de Cartagena en la última contienda electoral en sus gastos. Gran parte de estos gastos son atribuidos a la publicidad. Durante algún tiempo, voluntaria o involuntariamente, esta persona cumplió con el propósito de publicitar una de las candidaturas, pero ahora, la camiseta del habitante de calle parece un lejano recuerdo de promesas que se acabaron junto con las campañas. Esta imagen se resume en ocho conceptos: abandono, indiferencia, tristeza, dolor, desnutrición, ausencia de calidad de vida, muerte, soledad y desempleo”.
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Verdad que una imagen sí vale más que mil palabras. Y cada cabeza es un mundo.
DATOS:
Más de 262 mil personas en Cartagena viven en condiciones de pobreza y más de 40 mil en indigencia.
Hambre: El año pasado el 9% de los hogares en Cartagena dejaron de consumir alguna de las 3 comidas por falta de alimentos.
Miseria: Más de 40 mil personas en Cartagena están en la línea de pobreza monetaria extrema o miseria.
Afrodescendiente: De acuerdo al banco de la República, en las Unidades Comuneras de Gobierno donde se presentan mayores niveles de pobreza y miseria son las UCG 2, 4, 5, 6 y 14, que coinciden con las de mayor cantidad de población Afro.
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