Un estudio de la Universidad del Rosario corrobora lo que coloquialmente se conoce: las mujeres se pueden “parar de cabeza” y pueden estudiar más que los hombres, pero siempre estarán en desventaja frente a estos en empleo y salario.
Es tan grande la brecha entre mujeres y hombres en Colombia que, según el Observatorio Laboral de ese alma mater de la capital de la República, las mujeres tienen poco que celebrar en empleo y salario, muy a pesar de que en la legislación todo esté contemplado.
Iván Daniel Jaramillo, investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, dijo a este medio que en teoría quien esté mejor preparado académicamente debería ganar más, pero en el caso de las mujeres en Colombia eso no se da y prueba de ellos es que a pesar de estar mejor preparadas ganan menos que los hombres.
“El tema va más allá del patrón cultural, arraigado en 200 años de vida republicana. La igualdad, en lo jurídico existe, pero la realidad la contradice, y una prueba de eso es lo que pasa con las personas a cargo.
“Para un hombre, el tener personas a cargo en lo laboral no es problema, pero para una mujer, sí. Es más, esa condición es vista como un problema porque a la mujer se le asocia con que ella es la que debe atender al niño cuando éste se enferma, por ejemplo. En pocas palabras, una cosa es la ley y otra muy diferente es la práctica”, dice el profesor Jaramillo.
Explica que no todo deben ser leyes, sino que se debe trabajar para derrumbar esas barreras culturales que ponen a la mujer en desventaja. “Ese es un tema que se debe intervenir desde lo cultural, porque lo jurídico contrasta con lo social”.
NADA PARA CELEBRAR
Según el Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, por las siguientes cifras es que el sexo femenino no tiene nada que aplaudir durante celebraciones como el Día Internacional de la Mujer, que se conmemoró el pasado 8 de marzo.
- El desempleo femenino corresponde al 58,3% de la tasa nacional, en comparación con el 41,7% masculino.
- La brecha salarial es de 21%, en contraste con la participación en los procesos de formación que evidencian mayor participación de la mujer.
- En Colombia, el 3,4% de las mujeres hacen estudios de posgrado, frente al 2,5% de los hombres; el 8,6% de las mujeres tienen formación universitaria, en contraste con el 5,9% de los hombres; el 12% de las mujeres cursan estudios técnicos, en comparación con el 7,2% de los hombres; y el 31,6% del género femenino tiene grado de formación bachiller, a diferencia del 28,7% del masculino.
- Como consecuencia de la asignación cultural de los roles del cuidado del hogar y de otras personas, las mujeres ven reducida su participación en el sistema de relaciones laborales. Por eso es que tener personas a cargo reduce la oferta laboral femenina en 17,5% y la masculina solo en 2,5%.
En este sentido, dice el estudio citado, los patrones culturales de asignación al género femenino de las labores del hogar incide en el acceso al sistema de relaciones laborales, y el acceso a cargos con mejor remuneración determinan la necesidad de intervenir en la promoción del cambio cultural que haga efectivo el sistema normativo que promueve la igualdad ocupacional y salarial de género prevista en los Convenios 100 y 111 de la OIT, el artículo 13 de la Constitución Política y la Ley 1496 de 2011.
“Estos indicadores demuestran que las mujeres tienen mayor grado de formación sin que este factor aisladamente corrija la brecha ocupacional y salarial, demostrando la necesidad de evaluar otros factores que deben ser objeto de corrección”, señaló el investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario.
LA OIT
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) también coincide con el estudio de la Universidad del Rosario.
Dice la OIT que la participación de las mujeres en los mercados laborales de América Latina y el Caribe aumentó durante los últimos años, “pero aún falta mucho para eliminar las brechas de género en los mercados de trabajo y por lo tanto los países necesitan reforzar las estrategias destinadas a promover mayor igualdad”.
Así las cosas se puede concluir que más allá de los abrazos, felicitaciones, reconocimientos, detalles y demás, las mujeres en general y las colombianas en particular requieren políticas públicas que vayan más allá de simples normas y decretos que reivindiquen sus derechos en papel. Necesitan que se les trate igual que a los hombres en empleo y salario.
MUJERES EN EL MUNDO
La situación de las mujeres en el mundo tampoco es fácil, y la discriminación se sigue dando en muchos países.
En Afganistán, las mujeres son sometidas a tests de virginidad por médicos mandados por el gobierno. Eso fue calificado como una “agresión sexual”, por la organización Human Rights Watch (HRW).
En Irán, a pesar de que las mujeres representan más de la mitad de la población, son sólo el 3% de los diputados del Parlamento.
En Arabia Saudita, las mujeres no pueden conducir vehículos ni salir solas a la calle. Tampoco pueden interactuar con hombres fuera del hogar, entre otras cosas.
Las mujeres en América Latina ganan 83,9 unidades monetarias por cada 100 unidades que perciben los hombres, es decir, un 16% menos, un obstáculo para la autonomía económica, indicó un comunicado de Cepal. Dice que si se comparan las remuneraciones a ambos sexos según los años de estudio, una mujer podría recibir hasta un 25,6% menos que un hombre, lo cual sucede en la educación superior con 13 años y más de instrucción. (Fuente: agencias AP – AFP).
DÍA DE LA MUJER
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró en 1975 el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, para rendir tributo a las obreras y millones de mujeres que durante años han abogado por la igualdad de oportunidades y llamar la atención mundial sobre la desigualdad entre los géneros.
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