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Un colombiano en la puja por la Alcaldía de Miami

Miami Dade County es uno de los 67 condados en la Florida (Estados Unidos). Su población es de 2 millones 600 mil habitantes y hace parte del área metropolitana del Sur de la Florida. Lo conforman 19 ciudades dentro de las que están las más conocidas como Coral Gables, Doral, Florida City, Miami, Miami Beach, Miami Gardens, Miami Springs, norte, sur y oeste de Miami, entre otras. En total Miami Dade está compuesto por 34 municipalidades entre poblados y villas con potencial electoral.

Es por ello que al conocer que un colombiano aspira a la alcaldía del condado, se puede pensar que aspira a la alcaldía de la ciudad Miami, cuando no es así.

Es Alfred Santamaría Linero, un barranquillero con raíces maternales en Santa Marta, que a los 13 años se fue a Miami con su familia, a la que el grupo familiar llega bajo el liderazgo de su padre, José Ramón Santamaría, un exitoso abogado penalista en Barranquilla que decide dejarlo todo en el país para irse de misionero a Estados Unidos.

Este joven colombiano, de 35 años, estudió en escuelas públicas de Miami, ingresó a la Universidad Miami Dade College, estudió ciencias políticas en la Florida International University (FIU). Tiene Maestría en Administración de Negocios (MBA) de la Private Florida Research University/Nova Southeastern University y está próximo a terminar un doctorado en Filosofía en la Revelation University. Dos doctorados más le acompañan su currículo.

Con esos pergaminos, este colombiano sueña con conquistar el voto latino, de Centro, Sur América y el Caribe que está en la Florida y en el condado.

No todo fue color de rosa para lograr los sueños de estudiante, convertirse en profesional y líder político en una tierra extranjera.

En visita al periódico El Universal contó aspectos de su vida y de su proyecto político.

“Tengo un lado samario, soy primo de un cura famoso, el Padre Linero, que es de Santa Marta, mi madre se fue a Barranquilla donde conoció a mi padre”, cuenta Santamaría.

Dice que no se ha desconectado de Colombia y vive muy pendiente de todo lo que pasa aquí. Esa presencia de Colombia la llevó en Miami desde niño.

“En Miami cuando yo escuchaba el himno nacional me daban ganas de llorar; uno se acuerda de una arepa con huevo, una butifarra, el arroz de coco, el mote de queso y tiene al país consigo. Esa es la belleza más grande de este país, esas cosas tan sencillas”

El viaje
“Desde que tengo uso de razón el sueño de mis padres era irse de misioneros a Estados Unidos. Mi padre, un exitoso político y abogado, fundó un barrio, el barrio Santamaría. Pero decidieron venderlo todo, fincas, casas carros. Nuestra familia, el 80% aún vive en Barranquilla. Y nos fuimos a Miami, con un ministerio de ayuda humanitaria que trabaja, entre otros, con grupos hebreos difundiendo el evangelio de Cristo”, narra Alfred.

Cuenta que a los tres años sobrevino la crisis. Lo perdieron todo. Entonces, a los 15 años recuerda que su papá los reunió en su casa para decirles a él, sus dos hermanas y su madre que debían volver a Colombia.

“Yo recuerdo que mi padre dijo que debíamos volver, porque acá en Colombia tenía su profesión y a su familia, pero a eso se opuso la sensibilidad de mujer de mi madre, es por eso que creo que las mujeres son especiales en este mundo. Ella le preguntó que si habíamos ido a Estados Unidos a buscar dinero o a cumplir una misión. Yo me pongo a pensar qué hubiera sido si nos hubiéramos dejado seguir por la intelectualidad de mi padre y no por la intuición de mi madre”, dice.

Narra que entonces a su papá le tocó trabajar de vigilante, a su madre en una oficina de parqueos y diversos trabajos distintos a sus profesiones.

Hoy el joven político dice que a pesar de todas aquellas dificultades salieron adelante y pudo obtener los títulos académicos y trabajos profesionales que quiso.
“He trabajado con el Congreso de los Estados Unidos, logré mis doctorados, maestrías, y seguimos adelante”.

Los votos
Alfred aspira a conquistar no solo el voto colombiano sino el de los cubanos y los puertorriqueños así como el de los demás sectores latinos en el condado.

“Los ciudadanos de esas 34 municipalidades que conforman el condado de Miami Dade pueden votar. Allí está Kendall en donde reside la mayoría de colombianos en la Florida, más de medio millón. Ellos van a tener la oportunidad de votar hasta agosto 30 a través de los diferentes sistemas de votación, desde sus casas, o voto ausente, votación temprana o el último día que es el 30 de agosto”.

Recalca que antes de los afros la minoría latina es la más fuerte. “Si Barack Obama pudo alcanzar la presidencia qué no podemos lograr nosotros”, afirma.
Santamaría se enfrenta al alcalde, el cubano Carlos Giménez, y a la también cubana Raquel Regalado, la hija del alcalde de la ciudad de Miami, Tomás Regalado.
Confía en ganarse un gran porcentaje de votos colombianos y latinos.

Sobre su filiación política dice: “Estas elecciones por ley no son partidistas, ni demócratas ni republicanas, ni independientes, esto con el objeto de que participan más personas no por filiación política sino por quiénes son y qué ofrecen los candidatos. Pero yo he trabajado con demócratas y republicanos; con Jeb Bush, con Marco Rubio”.

Agrega que: “No voy a apoyar a Donald Trump”.

Confía en lograr muchos votos de los 500 mil colombianos que hacen parte del condado Miami Dade. Y 1 millón en toda la Florida.

Defiende las políticas de migración para los indocumentados. Santamaría maneja las cifras: de los 12 millones de indocumentados, que por más de 15 años están en el país, el 52% ya tiene hijos. “Esas personas merecen que les demos una oportunidad”.

“No estoy a favor del muro en la frontera pero sí de la seguridad porque por la frontera ingresan armas, drogas, prostitución”, dice.

Advierte que el estigma a los colombianos en Estados Unidos ya se acabó gracias al espíritu de trabajo y emprendimiento de sus paisanos. “El colombiano es muy emprendedor, ese estigma se ha ido gracias a figuras como Shakira, Sofía Vergara, Juanes, pero sobretodo porque el colombiano se ha ganado el respeto”.

Su liderazgo le ha permitido crear cuatro fundaciones sin ánimo de lucro: ‘Family Builders USA’, ‘Fundación Colombo Americanos Unidos’, ‘Fundación Latinoamericanos Unidos’ y ‘Comunidades en Acción’, a través de ellas su conexión con los colombianos en ese país ha sido muy fuerte, pero también con toda la comunidad latina.

Este es el colombiano que podría ser el alcalde del condado de Miami Dade, lo cual se sabrá en agosto 30.

“Con esfuerzo y con fe en Dios todo es posible, esa es mi insignia de vida. El trabajo con esfuerzo me permitió lograr todos mis estudios, mis doctorados, y ser un profesional. En mi condado los colombianos somos la comunidad latina más grande”.

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