Los brotes y las hojas de esta planta (no consuma las semillas hasta obtener permiso médico y mucho menos si está o cree estar embarazada) son aliados de la salud de nuestro corazón, pues “limpian” en su totalidad la sangre y reducen en ésta los niveles altos de colesterol así como las placas de grasa acumuladas en las arterias.
Muchos expertos naturistas la recomiendan para disminuir el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares. Y otros estudios aseguran que podría combatir el cáncer de estómago y de colon.
Es potencialmente diurética y eso significa que limpia los riñones y todo el sistema urinario de forma muy eficaz.
Se aconseja como coadyuvante en tratamientos para la osteoporosis (o como prevención), pues es una de hierbas más ricas en calcio que existen. Y en la menopausia funciona muy bien, pues contiene sustancias que imitan los efectos del estrógeno.
MÁS BENEFICIOS
Aliento… uff
Mientras su médico o su odontólogo determinan la causa del mal aliento, tome cada día una infusión de alfalfa, que es rica en clorofila… ¡Ni se imagina los resultados!
Azúcar y detox
Quienes sufren de diabetes pueden consumirla, así como aquellos que están en proceso de desintoxicación por consumo de alcohol.
¿Se le cae el pelo?
Tome un vaso de jugo de alfalfa tres veces a la semana. A muchas personas les ha resultado un tratamiento eficaz para combatir el problema.
Muchas vitaminas
Esta planta es increíblemente rica en vitaminas y minerales. Tiene complejo B, ácido fólico, vitaminas A, C y E, hierro, fósforo y calcio.
¡Con moderación!
Los suplementos de alfalfa deben tomarse siempre bajo supervisión médica. Mejor consúmala en su forma natural, pero sin excederse.
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