Siempre se suele pensar y programar el futuro, pero para que éste se pueda cumplir, se requiere de un presente que forme los cimientos y dé cuenta de algo fortalecido, de allí se puede entonces hablar del porvenir.
Cartagena se dispone para grandes cosas y sus hijos se han estado preparando, por eso es cada vez más común verlos partir, pero también, se vislumbra su regreso para trabajar por su tierra, para hacer empresa y proyectar esta ciudad a un plano competitivo en el país y el exterior.
Algunos han optado por quedarse desde los inicios, le apuestan a su sector educativo y desde allí van labrando el futuro que han querido, otros quieren experiencias mayores y parten a las grandes universidades a buscar retos, los cuales se traducen en habilidades que han de implementar al regresar.
Es la nueva generación que no se amilana ante nada, que ve a Cartagena como un puerto coherente con su historia, pero más que todo con el presente, ese que ellos elaboran día a día para entonces sí, poder hablar de futuro.
Revista Viernes despide 2010 con seis personajes actuantes, la generación que salió a buscar preparación y que aún sigue llenándose de sabiduría para que Cartagena crezca y se enaltezca con sus frutos.
David Espinosa Rondón
Polifacético
Responsabilidad y talento se conjugan en la personalidad de David Espinosa, el ingeniero industrial egresado de Penn State University en Pennsylvania, Estados Unidos y quien no dudó un momento en volver a Colombia para hacer empresa, en tanto que cristalizaba otros sueños.
Para muchas personas el rostro de David resulta familiar en otra faceta, la de cantante, pues en 2007 entró a la escena musical bajo el nombre artístico “David Milán”, con un compacto titulado “Corazón a mil”, que lo llevó a recorrer el país y buena parte de Estados Unidos.
Ese es uno de sus sueños materializados, se entrenó en la música al tiempo que estudiaba en el colegio, obteniendo en ambos los mejores resultados. Es el compositor de sus temas y aunque ahora se ha dado un compás de espera en su gran pasión, ésta volverá, porque sabe que puede dedicarse a todo lo que le gusta si se tiene constancia.
David es el joven exitoso que enfoca su profesión hacia la industria logística, lo cual alterna con los negocios de ganadería de su familia, ubicados en el departamento de Córdoba.
Incansable y minucioso en su trabajo, David Espinosa además de aportar sus conocimientos a reforzar el trabajo de su padre Clímaco Espinosa, también ha liderado la creación de dos empresas que impulsan el desarrollo en la ciudad y el país. Una de ellas, ASPGS Andino, es representante exclusivo para la Región Andina (Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Venezuela) de ASPGS Inc, empresa norteamericana líder global en sistemas de control de inventario y distribución para bodegas de nacionales, de zona franca, depósitos y operaciones conexas.
El crecimiento no se ha hecho esperar desde este frente, que ya cuenta con operaciones y clientes en Colombia y Perú, preparando para 2011 el ingreso a Ecuador.
La otra empresa creada por David Espinosa y un grupo de socios de Bogotá es Opeport, la cual brinda servicios de operación portuaria y asesoría a compañías en el interior del país. Con la misma busca direccionar carga de otros puertos del país hacia Cartagena.
David Espinosa tiene claro que la actualización en los estudios debe ser constante, por lo que se alista para viajar a Nueva York, donde se radicará un tiempo mientras cursa un MBA en la Columbia University y aprovechar para grabar parte del nuevo álbum que estará en el mercado en 2012.
David Espinosa cumplió ya la tarea de trabajar fuera del país un tiempo, pero llegó el momento de apostarle a su ciudad con el crecimiento del sector logístico, tema que lo apasiona.
En cuanto a la música, estará grabando en Nueva York, pues quiere situarse en la faceta que también le atrae y que tiene que ver con la interpretación de salsa, un género más urbano que desea explorar.
Su regreso a Colombia y en especial a Cartagena es inminente, nunca ha pensado en salir de acá, sabe que puede llevar paralelamente su profesión y la carrera artística, la misma que enriquece su alma.
Diana Rodríguez Arocha
La anfitriona perfecta
De finos modales y muy pausada al hablar, Diana Rodríguez Arocha es a primera vista la anfitriona ideal, la conversadora perfecta y la funcionaria diligente de una empresa que requiere de esas cualidades.
Estudió Administración de Empresas con un enfoque en Mercadeo Internacional en Washington y su estadía en Estados Unidos se prolongó más allá de la formación profesional, tras trabajar con la Agencia France Presse durante ocho años.
Tuvo la oportunidad de regresar a la universidad para cursar una maestría en Comunicaciones y Relaciones Públicas, que la direccionó con la misma agencia en París, trabajando en desarrollo de otros proyectos, específicamente en nuevas tecnologías.
France Presse fue una temporada que más que trabajo le aportó a Diana Rodríguez el acervo necesario para enfrentarse a la vida y regresó a Estados Unidos, concretamente a San Francisco, montando una filial que la detuvo allá por año y medio antes de regresar a Colombia al lado de su familia.
Explorando su tierra y satisfecha con las oportunidades que tuvo en el exterior, Diana decidió apostarle a la cotidianidad de su gente, con los buenos y malos momentos, pero que considera indispensables para ser feliz.
Actualmente es la Directora de Mercadeo del Hotel Sofitel Santa Clara, una oportunidad que considera “caída del cielo”, pues no estaba en sus planes, pero que la arraigó definitivamente a su tierra.
Un reto la afianzó, tenía que desarrollar un nuevo departamento de mercadeo, para llegar a cumplir las metas que ha trazado la multinacional para los próximos años.
La principal misión es apoyar al personal del hotel para convertirse en un “Sofitel Leyend”, colección de hoteles legendarios, a la cual el Santa Clara aspira pertenecer, pues está precalificado.
2011 es un año importante para esta empresa y allí está Diana y su trabajo para hacer de esta oportunidad un objetivo a corto plazo.
Gabriel Monroy Martínez
Estratega de la tecnología
Creer en su ciudad y trabajar incansablemente para darle oportunidades a su gente, es la misión que se ha trazado Gabriel Monroy, un joven empresario cuya compañía ha entrado en solidez precisamente bajo su gerencia.
Gabriel es Ingeniero de Sistemas, egresado de la Universidad del Norte, especializado en gerencia de producción, con cinco años de experiencia en Remaplast, empresa productora de tubería y accesorios de pvc, un proyecto que se inició hace casi un lustro y ya completan tres años en producción.
La primera contribución que están haciendo a Cartagena es la vinculación de personal que quedó cesante tras el retiro de grandes empresas de la ciudad, pues generar empleo es la meta.
Tiene un plan para crecer en Cartagena y a la vez utilizar el puerto para proveer más allá como ya vienen haciendo, lo que ya va a derivar en exportaciones.
Gabriel tenía claro al iniciar el pregrado que una vez lo culminara se iría a Estados Unidos para adquirir experiencia, eso hizo, fue una época con pocas proyecciones laborales y eso lo obligó a quedarse un tiempo más.
Regresó para renovar visa y encontró una propuesta familiar que desde su presentación vio como prometedora y con campo para desarrollar sus habilidades, empezando de cero.
Remaplast empezó con un primer análisis de costos y mercadeo en cero y hoy cuenta con una planta de producción de 350 toneladas, que le da vía para empezar un plan de expansión con el cual siguen apoyando el crecimiento de la mano de obra.
Ana Lucía Lecompte
Embajadora del progreso
Recorrer el mundo ha sido el reto que Ana Lucía Lecompte ha cumplido en los últimos años, llevándola a sitios tan desconocidos para el común de la gente, como interesantes para forjar su presente.
Administradora de empresas con enfoque a negocios internacionales, egresada de la Universidad de La Salle de Barcelona, Ana Lucía también desarrolló una carrera internacional, representando a diferentes medios de comunicación y abriéndoles puertas en muchos países.
Durante cuatro años vivió en quince países de Asia, África, Europa, el Caribe y América, lo que le ha permitido desarrollar una carrera con fuertes cimientos y la destreza en cuatro idiomas.
Ana Lucía regresa a Cartagena luego de cursar en París un master en Asuntos Públicos y Desarrollo Económico Territorial, dos años que enfocó a la intermediación público privada, pues es de gran interés para ella y eso la motivó a volver a su tierra.
Actualmente es la Directora de Competitividad Regional de la Cámara de Comercio de Cartagena, un cargo que le permite crear un área nueva allí, que se encargará de traer programas de desarrollo a la región.
Se considera espontánea y comercial, le gustan los negocios internacionales y ante todos los que requieren una planeación estratégica y un direccionamiento enfocado a la consecución de metas.
Ana Lucía está feliz de estar de vuelta, no se quiere ir y aunque su trabajo es nuevo aún, sabe que desde allí se pueden implementar cosas que logró extraer en otras culturas donde han dado excelentes resultados.
Lo que la mueve es el desarrollo de algunos negocios en los ámbitos internacionales para empresas locales y por eso se queda, para representar a las compañías cartageneras en esos mercados.
Define su experiencia como interesante, no sólo en el campo profesional, también a nivel de vida, pues tuvo que residir hasta en Burkina Faso, un país en medio de África, que junto con los otros destinos le aportó inmensamente a su presente y futuro.
Ana Lucía Lecompte ve a Cartagena como un gran polo de desarrollo, una ciudad con oportunidades, pero también insiste en que es responsabilidad de los cartageneros llevarla por buen camino.
Juan Sebastián Guerrero
El camino de la banca
Convencido de que Cartagena tiene las mejores oportunidades para quedarse y crecer, Juan Sebastián Guerrero Puello le apostó a su ciudad y en la misma ve una dinámica que lo lleva a ser mejor cada día.
Egresado de la facultad de Administración de Empresas de la Universidad Tecnológica de Bolívar y con una especialización en Finanzas de la misma institución, ha descubierto fortalezas que lo llevan al mundo de la banca, algo que lo seduce y mantiene expectante.
Actualmente Juan Sebastián es el Gerente Junior de la banca corporativa de Helm Bank, una experiencia que si se ve desde la estancia en Cartagena, se puede definir como un motor, un impulso que el sector empresarial necesita y que el puede llegar a proveer.
Gerente Junior, el cargo que desempeña Juan Sebastián, tiene que ver con la suplencia del gerente comercial, es el encargado de los clientes, cobrar cartera, entre otras gestiones comerciales dentro del banco.
Ayudar a las empresas en su crecimiento financiero, es parte de la misión que desarrolla en su día a día, de otra parte vincula las que aún no están en su portafolio, para darles la seguridad de una ciudad con expectativas de progreso.
Sabe que es prematuro hablar del futuro, Juan Sebastián Guerrero prefiere concentrarse en el presente que le está aportando experiencia y en la banca la está adquiriendo, porque su sueño es crear empresa.
Quiere hacer carrera allí, como financiero es fiel a ese sector que le dio el aval para quedarse, no descarta una salida de Cartagena, pero sólo sería para hacer una maestría, pero con la convicción de que su vida está aquí.
Adriana Murra Falla
Generando oportunidades
Comunicar es su mayor virtud, de allí que su trabajo se convierte en la llave que abre puertas para que las comunidades encuentren nuevas oportunidades.
Adriana Murra Falla es egresada de la facultad de Comunicación Social de la Universidad Javeriana, con énfasis en Desarrollo Organizacional, y cuya tesis le dio la oportunidad de acercarse más a su ciudad, pues con ella elaboró un manual de comunicación a la Fundación Proboquilla, el cual le mostró un adelanto en temas de comunicación, en relación con su comunidad y le generó un impacto positivo a la misma.
En Bogotá encontró oportunidades laborales que le representaban un futuro prometedor, pero trabajar por Cartagena la movía desde sus inicios en la profesión.
Regresar se convirtió en una meta, pues siempre vio con tristeza la partida de profesionales que pudieron hacer grandes cosas, pero que prefirieron un cargo más allá del hogar.
Actualmente es la Coordinadora de comunicaciones y canal virtual del plan de desarrollo por una sola Cartagena, de la Alcaldía Mayor, que se denominan Dependencias Unificadas de Atención, un supermercado de servicios que busca descentralizar la administración.
Adriana coordina la parte de comunicaciones y el proyecto ha generado mucho impacto en la comunidad, debido a que están disminuyendo en costos y tiempo, los trámites que requieran en su diario vivir.
La idea de este proyecto es devolver derechos al ciudadano, los mismos que se han visto vulnerados por décadas a manos de algunos funcionarios que confunden su trabajo haciéndoles creer que les hacen un favor.
El proceso ha incluido hasta capacitación al ciudadano, dándole a su vez información total sobre sus derechos y deberes, lo mismo que al funcionario.
El programa es novedoso en Cartagena y Adriana Murra avanza en el reto de la ejecución del mismo, ahora está segura que su misión está en la ciudad, además de emprender el montaje de una empresa familiar que prestará asesorías en responsabilidad social y relaciones públicas, un tema inherente en ellos.
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