Gregorr es un joven ‘viner’ al que su padre le está pidiendo que deje de hacer fotos ‘selfie’, pero hace caso omiso y corre tomando varias imágenes del momento, hasta que es atrapado. Un hecho gracioso logrado desde su perspectiva, que pretende hacer reír a otros y así ganar más seguidores.
La imaginación y creatividad fue puesta a prueba con Vine, una red social que permite producir y publicar videos de seis segundos para compartir lo que están haciendo de una forma divertida, concisa y original.
El éxito de Vine lo marcó la categoría de comedia, donde miles de viners se entretienen grabando breves videos de sus más extrañas y ocurrentes vivencias con amigos, mientras se mofan viendo a otros usuarios.
Esta red social, relativamente nueva, fue lanzada el 24 de enero de 2013 y funcionaba inicialmente solo para IPhone, pero desde junio del mismo año se expandió a los dispositivos que utilizan Android como sistema operativo. Sus fundadores, Dom Hofmann, Rus Yusupov, Luis Adrian Pilatuña, Rodrigo Fragoso Garcia y Dazaeth vendieron los derechos de la compañía a Twitter.
Los vines son grabados mediante la cámara del dispositivo utilizado al mantener presionado el icono de grabar que aparece en la pantalla, lo que da un efecto de repetición similar a los GIF (Tipo de codificación para gráficos muy usada en internet), pero con la posibilidad de añadir audio para ambientar el producto.
El éxito de Vine ha trascendido los límites de una red social usada por los Geeks, una parte de la población que vive escudriñando en la web para saber qué novedades y aplicaciones nuevas se han desarrollado, y ha logrado llegar al corazón de empresas, naciones y medios de comunicación, entre otros.
Con mensajes de aliento a sus tropas el presidente de los Estados Unidos se dirige desde la Casa Blanca a los soldados que se encuentran en Medio Oriente. A su vez, la primera dama, Michelle Obama, muestra su faceta bromista, al salir corriendo para encestar en un tablero sostenido por uno jugador de los Miami Heats, mientras grababan una entrevista con otros miembros del equipo de baloncesto.
Las compañías han virado hacia Vine como una estrategia comercial que les permite acercarse a las personas, mostrar su lado humano y ganar fieles consumidores. Las campañas publicitarias son amplias, hasta el punto de usar a los viners más famosos de la red para innovar y aumentar la confianza de sus seguidores.
Los casos en los que los jóvenes han salido del anonimato al estrellato con Vine son varios, entre ellos se encuentra Matthew Windey, un barranquillero quien se popularizó gracias a sus cómicas grabaciones, en las que se burla de él y situaciones cotidianas confiriéndole un tinte más surrealista.
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