Según las versiones, Sebastián Villegas habría logrado salir de los calabozos de la estación de Policía, pero hubo una inmediata reacción que permitió su recaptura.
Durante ese periodo se han incautado 1.036 armas de fuego, 1.319 armas blancas, 135 alimentadoras de armas, más de 40.200 balas y cerca de 5.000 explosivos.
Entre el 9 y el 21 de enero las autoridades ecuatorianas también afirman haber abatido a cinco presuntos miembros de estas bandas ahora catalogadas como terroristas.