El terremoto dejó daños en más de 43.000 viviendas, y las pérdidas acarreadas para particulares, empresas e infraestructuras públicas pueden llegar hasta los 2,6 billones de yenes.
El terremoto de magnitud 7,6 con epicentro en la península de Noto (centro de Japón) causó daños generalizados, además de dejar 236 fallecidos y una veintena de desaparecidos.
Los servicios de rescate se encuentran realizando labores de búsqueda y rescate, así como de reubicación de víctimas y verificación de infraestructuras.
El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico dijo que, basándose en la magnitud y la ubicación, se prevé que olas de tsunami azoten Filipinas, Indonesia, Palaos y Malasia.