Human Rights Watch recalcó que hay estudios serios que dan cuenta de que las condiciones laborales que le impone Cuba a los profesionales que envía a trabajar a otros países podrían elevarse a “trabajo forzoso”.
Keith Raniere, el gurú de la secta de esclavas sexuales que eran grabadas a fuego con sus iniciales, fue sentenciado el martes a 120 años de prisión por un juez de Nueva York.