Miembros de la etnia Wiwa huyeron de los enfrentamientos entre las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada.
Entre los secuestrados estaban dos menores de edad y el Consejo Regional Indígena del Cauca denunció las intenciones de los ilegales de un posible reclutamiento forzado.