Rafael Pinzón Riveros, empresario pionero en la industria cinematográfica de Cartagena, revoluciona el cine mudo con su invento de sincronización sonido-película en la década de 1920.
Las primeras películas llegan a Cartagena en 1897 en el Teatro Mainero, antiguo teatro de comedias de la Colonia, gracias al empresario Salvador Negra y Pagés